Con la puesta en marcha estos próximos días del plan de desescalada, que ha organizado el Gobierno tras la crisis del coronavirus, se produce el fin del confinamiento total al tiempo que se empieza a intentar recuperar la actividad económica. Por eso, además de indicar las pautas a los ciudadanos para poder salir a la calle, ha establecido unas medidas muy concretas que deben respetar los diferentes negocios.
En concreto, desde el Ministerio de Sanidad y desde el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo se ha elaborado una guía de buenas prácticas para que los propietarios de esos establecimientos o los encargados de mercadillos y centros comerciales pongan nuevamente en funcionamiento su actividad sin riesgos para ellos y, por supuesto, sin poner en peligro tampoco a sus clientes.
Un documento ese en el que no solo se recogen medidas a respetar por parte de los trabajadores sino también otras que son esenciales poner en práctica en las instalaciones.
Aunque ha indicado el Gobierno recomendaciones muy concretas para los distintos sectores comerciales, a nivel general ha expuesto unas pautas para todas las tiendas que podrán comenzar a abrir sus puertas a partir de la fase 1, es decir, del 11 de mayo. Y entre esas se encuentran las siguientes:
En la mencionada fase 1, siempre que así lo considere oportuno el ayuntamiento de la localidad en cuestión y que lo proponga adecuadamente, se podrán poner en marcha los mercadillos que, de forma habitual, se desarrollan en la vía pública.
Eso sí, para que puedan llevarse a cabo deberán respetarse una serie de condiciones:
En la llamada fase 2 es cuando se producirá la apertura de estas superficies comerciales, aunque se prohibirá la permanencia en las zonas recreativas o comunes de aquellas. Asimismo, se han establecido otras pautas al respecto:
Cuando llegue la fase 3 del plan de desescalada se permitirá ya la permanencia en esas citadas zonas comunes y recreativas y el aforo se limitará al 50 %.