Imagen de Manuel López en un montaje con un hospital de fondo

Manuel, el español fallecido tras esperar una operación dos años: caso cerrado

Se ha llegado a un acuerdo por el que un hospital pagará una gran suma de dinero a la familia de un fallecido que esperó dos años a ser intervenido

Manuel, un hombre de 65 años, falleció en enero del 2015 tras estar más de dos años en  lista de  espera para una intervención. 

La sanidad española siempre ha sobresalido a nivel internacional. Muchos la sitúan como una de las mejores de todo el mundo y muchos pacientes de diferentes partes del mundo acuden para ser atendidos. 

Aun así, hay historias y relatos de personas cuya experiencia con los centros hospitalarios dejan muy impactados a todos. Muchas se limitan a negligencias o una atención nefasta que pone en evidencia la falta de profesionalidad de muchos médicos. 

Sin embargo, hay que ser consciente de que, desde hace años, este sector está siendo sometido a constantes recortes y reducción de fondos y personal. Esto genera que los tiempos de espera se dilaten y las citas se concedan en fechas bastante lejanas. 

Esta situación pone en relieve la importancia que tiene este sector para la sociedad y lo mal gestionada que está desde las instituciones políticas. De hecho, muchos expertos sanitarios han alzado la voz para exigir mejoras en las instalaciones y un aumento de los recursos. 

Hace más de seis años tuvo lugar una de estas incidencias que acabaron con la vida de una persona. Esta semana se ha conocido el fallo del juez ante las demandas de la familia y la repercusión que tendrá para el centro será nefastas. 

Manuel falleció tras dos años en lista de espera

El hombre tenía 65 años cuando falleció en el año 2015 en el hospital Bellvitge en Hospitalet de Llobregat, en Cataluña. Padecía una isquemia intestinal generalizada que fue el resultado de una hernia que no fue extirpada a tiempo. 

Esta enfermedad surgió a raíz de un cáncer interhepático que padeció en el año 2009 y del que se recuperó con total normalidad. Sin embargo, le dejó unas secuelas que derivaron en la aparición de una hernia en la parte superior del abdomen. 

Este bulto comenzó a hacerse evidente, ya que su desarrollo se hacía palpable desde el exterior. En marzo del 2011, fue intervenido sin mucho éxito y la dolencia continuó desarrollando una nueva hernia en la misma zona. 

Meses más tarde, regresó a la especialidad que le atendía y solicitaron un TAC abdominal para observar la situación. Los resultados disiparon todas las dudas y la doctora en cuestión le notificó que debía someterse a una nueva intervención debido al riesgo. Desde el 9 de enero de 2013 Manuel se encontraba en lista de espera para ser intervenido. 

La situación era muy delicada, ya que la propia hernia sobresalía del abdomen haciéndose más que evidente la urgencia que tenía. Aun así, estaba en lista de espera para ser intervenido sin tomar medidas para adelantarla. 

Él mismo acudió en varias ocasiones al centro para solicitar que la operación se realizara cuanto antes, ya que su vida estaba en grave peligro. Sin embargo, sus peticiones no fueron escuchadas ni atendidas. 

En octubre del 2014 ingresó en estado muy crítico con vómitos fuertes y una fiebre muy elevada. A consecuencia directa de su cuadro clínico, entró en coma en diciembre y falleció en enero de 2015. 

Todos estos hechos han sido expuestos en la demanda de la familia hacia el citado hospital. En un acuerdo extrajudicial con el seguro se ha llegado a un acuerdo por el que el centro deberá pagar una indemnización de 105 000 euros a la familia del fallecido. 

Este caso pone en relieve las trágicas consecuencias que están teniendo los recortes en la sanidad española. Además, la presencia de la pandemia del coronavirus ha acentuado la situación provocando el colapso de este ámbito.