Un hombre ha agredido a tres sanitarios que estaban atendiendo a su mujer tras romper aguas. Los hechos han ocurrido en Alhama de Murcia, en una vivienda de su casco urbano.
Las víctimas fueron una doctora, un enfermero y un técnico sanitario. Todos ellos viajaban a bordo de la ambulancia que fue movilizada a casa del agresor después de que su esposa se pusiera de parto.
Los profesionales se trasladaron a la zona porque recibieron una llamada alertando de una mujer que había roto aguas y que no tenía coche.
La mujer, de credo musulmán, llevaba en ese momento el hiyab, el pañuelo con el que se envuelven la cabeza. Cuando quisieron ayudarla y tumbarla sobre la camilla, el pañuelo empezó a "estorbarles" porque, por protocolo, tenían que ponerle una mascarilla.
Los médicos le pidieron que se quitase el pañuelo, algo para lo que ella "no puso ningún impedimento", según explican los sanitarios. Pero a su marido no le hizo ninguna gracia que los profesionales le hiciesen esa petición.
El hombre reaccionó de forma violenta y "empujó" a uno de los sanitarios. Les acusó de ser "racistas" y de no "respetar sus tradiciones". Además, se negó en rotundo a que se llevaran a la mujer en la ambulancia, ya que dos de los sanitarios eran varones.
Ante esta situación, los médicos tuvieron que llamar a la Policía Local, que se personó en el domicilio. Uno de los agredidos explica que en un momento de la situación dijo "vámonos, que el niño nace". Acto seguido, pudieron desplazarse hasta el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia.
Después de dejar a la mujer en el hospital, los sanitarios se dirigieron al cuartel policial para presentar una denuncia. Demandaron al hombre, de 39 años y de origen marroquí, por sus agresiones contra ellos.
"Es la primera vez que un hombre se preocupa más por un pañuelo que por su hijo", lamenta uno de los sanitarios en Levante-EMV.
El Colegio de Enfermería condena la agresión a los sanitarios
El Colegio de Enfermería de Murcia ha respondido ante estos hechos y ha condenado la agresión de forma pública. El organismo ha pedido a las instituciones públicas que se persigan estos actos y que no queden impunes.
Su secretario, Eduardo Estrella, ha explicado además que el Colegio pone asistencia jurídica a disposición de todos los colegiados y colegiadas ante estas situaciones.
Estrella ha insistido también en la necesidad de promover la figura del interlocutor policial que coordine las agresiones a sanitarios. De esta forma, podría denunciar inmediatamente los hechos denunciados desde el Observatorio contra la Violencia.
Este hecho llega en un momento en que las agresiones al personal sanitario han aumentado en los últimos años. En Murcia, por ejemplo, en 2020 se registraron un total de 307 agresiones, según los datos del Servicio Murciano de Salud.
De las 307 agresiones, 52 se produjeron contra profesionales de la Atención Especializada y otras 59 contra la Atención Primaria.
El Consejo General de Enfermería corrobora esta tendencia. Asegura que en 2020 las agresiones a profesionales sanitarios aumentaron un 13 % respecto con el año anterior.
Aun así, desde el organismo aclaran que las cifras son mayores, ya que solo recogen los actos que acaban siendo denunciados. Admiten que hay muchas agresiones que los profesionales no trasladan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Hace un mes, por ejemplo, llegaron a denunciarse cuatro agresiones de este tipo en apenas una semana en la costa de Granada.