Policía Nacional en las calles de Málaga en septiembre de 2017

Mónica, la panadera de 52 años asesinada por su pareja y hallada por su hijo en España

La víctima tenía dos hijos de una relación anterior y llevaba dos meses viviendo con su nueva pareja

Se llamaba Mónica, tenía 52 años y ha perdido la vida esta noche a manos de su marido en su vivienda de La Coruña. La víctima era muy conocida en su barrio, O Birloque, porque regentaba una panadería. Ha sido su hijo quien ha dado la voz de alarma al encontrar a su madre tendida sobre un charco de sangre.

Los hechos han tenido lugar alrededor de las 01:30 horas de la madrugada en el domicilio de la calle Juan Darriba. Varias patrullas de Policía Nacional se han dirigido hasta el lugar con una ambulancia, pero no han podido salvar la vida de la mujer. Con su muerte, el número de mujeres fallecidas a manos de sus parejas en España este año asciende a 35.

Mónica Marcos era la propietaria de la panadería del barrio coruñés de O Birloque, donde vivía y era muy conocida. Tenía dos hijos de una relación anterior y hacia apenas dos meses que había iniciado una relación con su nueva pareja. A pesar del poco tiempo que llevaban, ya vivían juntos.

Ha sido precisamente uno de sus hijos el que la ha encontrado muerta. El joven llegó a casa después del trabajo y halló a su madre sobre un charco de sangre y un cuchillo a su lado. Avisó a emergencias pero ya no pudieron hacer nada por la víctima, que presentaba heridas por arma blanca de mucha gravedad.

Después de matar a su pareja, el agresor huyó del lugar y en estos momentos se encuentra en paradero desconocido. La policía ha puesto en marcha un dispositivo para dar con el hombre, que tiene antecedentes por violencia de género. La investigación está en manos de la policía judicial, que esta mañana se ha desplazado hasta el lugar del crimen.

Buscan pruebas en el domicilio

Horas después del asesinato, los investigadores se han presentado en el domicilio de la víctima para obtener pruebas del crimen. "Estamos investigando y no vamos a hacer declaraciones", afirmaron en La Voz de Galicia. Cualquier prueba puede ser determinante para inculpar al autor de los hechos.

Los vecinos han asistido a la llegada de la policía y los investigadores sobrecogidos aún por la noticia. La víctima era una mujer muy querida por todos y la desolación se ha apoderado de este tranquilo barrio coruñés. La vecina del piso de abajo ha explicado a Radio Voz que no escuchó nada, y que lamenta no haberlo podido evitar. 

Una mujer muy querida en el barrio

El ambiente en el barrio es de desolación. Mónica Marcos era una mujer conocida y querida por sus vecinos, que no terminan de creerse la fatídica noticia. Su vecina del piso inferior aseguró en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz, que no escuchó nada y lamenta no «haber podido ayudar en algo».

En Galicia se registró un repunte de la violencia machista en el primer trimestre de este año, pero Mónica es la primera víctima mortal. Entre el 1 de enero y el 31 de marzo se registraron 1.434 denuncias por violencia machista, un 3,4% más que el mismo período del año pasado. La mujer fallecida en La Coruña es la víctima 35 del machismo en España en 2021.

Segunda mujer muerta esta semana

Su muerte se suma a la de Zuita, la mujer de 40 años degollada por su marido esta semana en Villajoyosa, Alicante. El agresor atacó mortalmente a su mujer y luego se precipitó por el puente del río Amadorio quitándose la vida. Este crimen deja además tres hijos huérfanos de 3, 10 y 14 años.

De hecho, todas las alarmas saltaron cuando los tres niños de la pareja vieron que su madre no les iba a buscar al colegio. Llamaron a la Guardia Civil, que inmediatamente conectaron el hecho con el suicidio del puente. Creían que el hombre habría podido matar a su mujer y luego se habría quitado la vida.

Estaban en lo cierto, y cuando llegaron al domicilio se encontraron a la víctima degollada. Pocas horas después se confirma la muerte de otra mujer, Mónica, en circunstancias parecidas. La prioridad de la policía ahora es encontrar al agresor, que se encuentra en paradero desconocido.