Los alumnos del instituto de Getares, en Algeciras, se llevaron una sorpresa muy desagradable el pasado miércoles. Un caballo, que permanecía en un terreno colindante al centro educativo, apareció muerto con la cabeza cortada.
El Partido Animalista Pacma se encargó de denunciarlo ante la Guardia Civil. El animal era muy conocido en la zona y los vecinos sabían que no recibía los cuidados adecuados. De hecho, el Seprona señaló que los propietarios contaban ya con varias denuncias previas por tenencia inadecuada de animales.
Durante un tiempo sorprendió la ausencia del caballo por las inmediaciones del instituto. Pero en realidad, lo que alertó a los vecinos fue el desagradable olor que salía de la parte de atrás del recinto educativo de Getares. Se trata de una zona de campo, que era donde solía permanecer el animal.
Hasta allí se desplazó este miércoles la coordinadora de esta formación política en el Campo de Gibraltar, Mabel de Montalbán. Pudo comprobar en primera persona el estado que presentaba. El caballo se encontraba decapitado y atado a un árbol.
Hicieron un rastreo por la zona para tratar de localizar la cabeza, pero sin demasiada fortuna. Sospechan que alguien se la pudo llevar con algún tipo de intención.
Los vecinos del lugar señalaron que se trataba de un animal muy tranquilo, que llevaba un tiempo pastando en aquella parcela. Mostraban su preocupación por la extrema delgadez que tenía. Aquello le hizo ganarse el cariño de la gente de la zona, que sentía cierta lástima por su estado.
Los responsables del Pacma se pusieron en contacto con agentes del Seprona para comunicarles lo ocurrido. Se desplazaron hasta el lugar para confirmar los hechos y llegaron a una conclusión. Es posible que le cortaran la cabeza con el propósito de hacer desaparecer el microchip.
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Dicho dispositivo suele colocarse a la altura del cuello. Sospechan que pudieron acabar con su vida en el mismo sitio en el que apareció. No apreciaron restos de sangre alrededor del cadáver ni tampoco marcas de haber sido arrastrado.
Fue un corte muy limpio. Todo hace indicar que el tajo se realizó post mortem, aunque están pendientes de que se confirme esto. Debe ser un veterinario el que precise en qué situación lo mataron.
La formación animalista explica que la recomendación de los agentes del Seprona es que no denuncien esta muerte. Principalmente porque no serviría "para nada" y resultaría "muy complicado encontrar al culpable". En cualquier caso, ellos se encargarían de realizar las "gestiones" pertinentes para esclarecer lo sucedido y buscar al responsable.
El caso del caballo muerto se pudo haber evitado
Esta organización política lamenta que no se hayan tomado medidas previas para evitar la muerte del caballo. Sobre todo porque había denuncias con anterioridad y el Seprona tenía constancia de la situación de los animales de esa familia.
Entienden que el trabajo era "bastante sencillo" y que no se debe pasar por alto "la decapitación de un caballo". Además, "han dejado su cuerpo tirado al lado de un instituto, pudriéndose, sin una necropsia que certifique la causa de la muerte".
Insisten en la necesidad de encontrar a los responsables de esta muerte. "No solo por la mutilación, sino por la presunta falta de atención veterinaria, lo cual también implica un delito", señalan molestos.
De momento, desde el Pacma ya han presentado la correspondiente denuncia y reclaman que se lleven a cabo todas las acciones legales que procedan. Quieren que alguien pague por la muerte tan cruel a este caballo junto a un instituto de Algeciras.