Se llamaba Celene Gabriele Colantonio, pero todos la conocían como Nati. Hizo historia al ser la primera menor de edad en cambiar de género en todo el mundo cuando sólo tenía 14 años. Este martes, a la edad de 31 años, fue hallada muerta en su domicilio de Mina Clavero, en Córdoba (Argentina).
Nati, que pasó parte de su vida en España, fue encontrada sin vida en su dormitorio por su padrastro. Las autoridades catalogaron el suceso como “muerte dudosa”, aunque los primeros resultados de la autopsia han descartado indicios de criminalidad. Trabajan con la hipótesis principal de un suicidio.
La historia de Nati se remonta a varios años atrás, cuando era solo una adolescente e inició una batalla legal para cambiar de sexo. Contó con el apoyo de sus padres, y su ejemplo marcó un precedente en todo el mundo. Tras su paso por España volvió a Argentina, donde ha aparecido muerta en extrañas circunstancias.
La decisión que cambió su vida
“Siempre tuvo mi yo, mi identidad, pero había que ser íntegra y fue un renacer”, explicó en una ocasión ella misma. Desde muy joven Celene Gabriela sintió que vivía en un cuerpo equivocado y tomó la firme decisión de cambiar su identidad. Sus padres compartieron su deseo y la acompañaron en el proceso.
A la edad de 14 años inició una dura batalla judicial para acceder a la operación de cambio de sexo. Su empeño surgió efecto y tres años después consiguió la autorización de la justicia para transformar su cuerpo de forma inmediata. Al hacerlo se convirtió en la primera menor de edad en cambiar de sexo.
Su caso sentó un precedente judicial, científico y cultural que recorrió todo el mundo no sin polémica. No fue un camino fácil, ya que la primera solicitud presentada por sus padres fue rechazada por la justicia. Sin embargo, en 2007 el Tribunal Superior de Justicia ordenó tramitar la causa y aprobar la operación.
La hipótesis sobre su muerte
Nati nació en julio de 1990 en Villa Dolores, en el Valle de Traslasierra que se encuentra en la provincia argentina de Córdoba. Tras una larga batalla conquistó el sueño de una nueva identidad tanto física como legal. Durante los siguientes años vivió entre España y su lugar natal, donde estudió la carrera de Bellas Artes.
Álex, Esteban y Claudia: tres alumnos del mismo centro fallecen en pocos días
Finalmente se instaló en Argentina donde empezó a trabajar en el sector de la artesanía y desarrolló sus inquietudes artísticas. Ayer, su padrastro la encontró muerta en la habitación e iniciaron una investigación para esclarecer lo ocurrido. Su cuerpo fue trasladado al centro forense para la realización de la autopsia.
Los resultados preliminares destacan que “no hay heridas físicas ni indicios de homicidio”, y por lo tanto apuntan a “una muerte natural o un suicidio”. Ahora, las autoridades están a la espera de los resultados toxicológicos para saber si tomó algún tipo de sustancia. En un principio se decantan por la hipótesis de un suicidio.
Sometida a una gran presión
Fuentes de la investigación han desvelado que “en la casa, donde vivía sola, no había nada fuera de lo normal”. En una primera observación, el cuerpo tampoco presentaba signos de violencia. Las autoridades siguen haciendo su trabajo, y no ha trascendido si la joven sufría algún tipo de depresión.
El caso de Nati devolvió a la actualidad el fenómeno conocido como síndrome disforia de género. Este término se utiliza para describir la incomodidad que sienten los adolescentes con su cuerpo y su identidad. Esta menor ayudó a conocer la realidad sin tabúes ni prejuicios, y a afrontarla en toda su complejidad.
“Era más fácil cambiar mi cuerpo que mi mente”, contó Nati en una entrevista, donde puso en valor “el coraje de mis padres aquellos años”. La joven siempre agradeció a sus padres “por haberse enfrentado al reto conmigo, haberme cuidado y protegido del acoso”. Y es que en aquel tiempo sufrió mucha presión social.