Los servicios de Emergencias de la Comunidad de Madrid han informado este domingo, 18 de abril, del hallazgo de un bebé de apenas cuatro días de edad que había sido abandonado en la capital, concretamente en una plaza del distrito Fuencarral-El Pardo.
Al parecer, el bebé ha sido abandonado en el interior de una bolsa de cartón, arropado dentro de un saco y rodeado con una sábana. Una persona que andaba por la zona en ese momento escuchó los llantos del bebé alrededor de la plaza de Corcubión, por lo que alertó a los servicios de emergencias.
Sanitarios del Samur-Protección Civil se han trasladado hasta el lugar de los hechos y han explorado a la pequeña, a la que han encontrado en buen estado y han trasladado al Hospital de la Paz junto a la Policía Nacional, que también se personó en el lugar y que se ha hecho cargo de la investigación.
A causa del hallazgo de la pequeña, el Samur-Protección Civil ha activado el protocolo de maltrato infantil en un neonato. De momento, se desconocen más datos sobre este suceso y la Policía sigue investigando quien pudo haberla abandonado allí.
Las autoridades asumen la tutela de otro bebé abandonado
Por desgracia, este tipo de situaciones no son únicas en nuestro país y de vez en cuando hay que lamentar que bebés muy pequeños hayan sido abandonados por sus progenitores.
Hace dos meses, otro bebé fue abandonado en la localidad de Torrijos, en Castilla-La Mancha. Concretamente, los hechos ocurrieron el pasado mes de febrero, cuando un viandante encontró al bebé dentro de un contenedor de basura.
Según se conoció horas después, la madre del bebé era una joven de nacionalidad marroquí y de solamente 19 años de edad. Después de que la Guardia Civil la detuviese por el abandono del menor, la mujer tuvo que ser trasladada a un hospital por su estado de salud, donde descubrieron que tenía coronavirus debido al protocolo que se sigue en los centros hospitalarios cada vez que ingresa una persona.
El caso causó mucha conmoción en la zona hasta el punto en que el gobierno de Castilla-La Mancha acabó quedándose con la tutela del bebé. La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, explicó que la decisión se tomó por protección del menor y que estaban a la espera de encontrar una familia de urgencia adecuada para el niño.
Aun así, al conocerse quién era la madre del menor, hubo quien preguntó a la Consejera si no sería más adecuado que el bebé se quedase con su familia materna, a lo que Aurelia Sánchez respondió que el gobierno valora «todas las situaciones» porque el menor tiene derecho a una familia, así que todas las posibilidades estaban abiertas.
La obligación de las autoridades es asegurar el bienestar del menor, por lo que se coordinaron los distintos servicios de la administración regional y la judicatura.
Sobre la madre del niño, Aurelia Sánchez afirmó en su momento que «dar un bebé en adopción no es un delito, pero abandonar a un menor sí», por lo que se seguiría el procedimiento judicial adecuado para este caso.
La consejera aseguró que Castilla-La Mancha haría todo lo que fuese necesario para que «los niños y menores siempre estén protegidos en el caso de que sus padres no pudieran protegerlos o no existieran».