La Agencia Tributaria tiene bajo la manga una serie de herramientas y protocolos de actuación para controlar el fisco de todos los ciudadanos españoles.
Luchar contra el fraude fiscal y la economía sumergida no es una tarea fácil. Sin embargo, la evolución tecnológica está facilitando cada vez más la labor de los inspectores.
No solo por las herramientas de control que les proporciona, sino porque está cambiando los hábitos de consumo de la población.
Los pagos electrónicos, cuyas transacciones quedan completamente registradas por el banco, están ganando terreno a los pagos en efectivo, mientras que las cuentas bancarias de ahorro han sustituido a muchas cajas fuertes y colchones que durante años almacenaron el dinero en el hogar.
En cualquier caso, cabe recordar que no es ilegal tener dinero en efectivo en el domicilio, siempre y cuando sea declarado en la Renta. De lo contrario, se trataría de 'dinero en negro' que podría llevar a Hacienda a abrir una investigación para descubrir la procedencia del capital.
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Hacienda puede vigilar el dinero que entra en tu cuenta si supera los 2.500 euros
Precisamente, para evitar la entrada en circulación de dinero no declarado, la Agencia Tributaria cuenta con unos mecanismos de control para intensificar la inspección sobre las transacciones o los ingresos bancarios elevados que puedan resultar sospechosos.
De esta forma, cualquier español tiene que ser consciente de que podrá ser vigilado por Hacienda si en su cuenta bancaria recibe un ingreso superior a los 2.500 euros. En caso de que el movimiento consista en la retirada de dinero, el montante podría alcanzar los 3.000 euros.
A partir de dicha cuantía, el Banco de España notificará a Hacienda sobre la transacción, ya que se podría considerar como un ingreso no justificado y los inspectores podrían proceder a iniciar una investigación para descubrir de dónde procede el dinero.
Si la procedencia del dinero está justificada y la cuantía está declarada ante Hacienda, no habrá ningún inconveniente con la transacción. Pero, en caso de poder justificar el ingreso, se obligaría al ciudadano tributar hasta el 50% de la cantidad investigada, tal y como recuerda 'El Economista'.
Hacienda: más control sobre los pagos en efectivo y las fortunas deslocalizadas
Para tener bien controlados los pagos en efectivo, el actual Ministerio de Hacienda dirigido por María Jesús Montero ha puesto una limitación a los pagos en efectivo entre empresas y profesionales.
Con la nueva norma se estableció un límite de 1.000 para realizar pagos en efectivo para determinadas actividades económicas entre profesionales y empresas, aunque el límite para los clientes particulares sigue estando en los 2.500 euros.
Esta limitación ha venido acompañada de una serie de medidas que tienen como objetivo recaudar unos 828 millones de euros al año de la lucha contra el fraude fiscal, entre ellas la prohibición de las amnistías fiscales y el mayor control sobre el uso de nuevas tecnologías, como las criptomonedas o la prohibición del software de doble uso.
Además, Hacienda ha implementado un nuevo sistema de vigilancia artificial para modernizar las inspecciones y reforzar el control sobre las grandes fortunas españolas deslocalizadas de forma fraudulenta en el extranjero.
En plena polémica por la decisión de algunos 'youtubers' de marcharse a Andorra para pagar menos impuestos, la Agencia Tributaria ha puesto el foco sobre los españoles que fingen residir en el extranjero para evitar pagar impuestos en España pero, en la práctica, siguen desarrollando su vida en nuestro país.
Cabe recordar que es, en este punto, cuando se produce el fraude fiscal, ya que cualquier persona es libre de cambiar su residencia a un país extranjero y llevarse su fortuna para no tributar en nuestro país.