La policía trata de esclarecer los motivos de la brutal paliza que acabó con la vida del joven Samuel, el pasado sábado en La Coruña. Los tres detenidos podrían pasar hoy a disposición judicial. De momento, se han limitado a decir que iban borrachos.
Los agentes tienen claro que los detenidos son el autor del crimen, su amigo y la chica que los azuzó. Intentan reconstruir los instantes de la discusión y el momento de la pelea. Trabajan noche y día, sin descanso, para resolver las incógnitas abiertas.
Será fundamental para armar la acusación contra los presuntos responsables del crimen. La gran duda es si fue un crimen homófobo o un homicidio con ensañamiento. Esto modificaría sustancialmente los años de cárcel para los acusados.
Para esclarecer qué pasó la madrugada del 3 de julio, la policía revisa las cámaras e interroga a los testigos directos de la agresión. El objetivo es reconstruir los últimos momentos de Samuel con vida. Esto les llevó a la detención de tres personas de entre 20 y 25 años.
Uno de ellos es el chico que se encaró con la víctima al grito de «o dejas de grabar o te mato, maricón». Fue eso lo que, en un principio, hizo pensar en un delito de odio. Pero con todos los elementos encima de la mesa, los investigadores descartan esta posibilidad.
Un golpe mortal en la cabeza
La autopsia indica que el joven fallecido recibió un golpe mortal en la cabeza. La principal hipótesis es que ese mismo sujeto le dio los primeros puñetazos. Solo se detuvo cuando otra persona, de origen africano, se puso en medio para evitar que siguiese.
A continuación fue a buscar a sus amigos para seguir agrediendo al chico durante unos 200 metros. El examen forense revela politraumatismos en todo el cuerpo, compatibles con una soberana paliza. Luego dejaron al joven malherido en el suelo, y huyeron.
El otro detenido es el amigo del primer agresor, y el que supuestamente dio el segundo golpe a Samuel. La tercera detenida es una chica, que habría alentado a los agresores. Los tres se han negado a declarar ante la policía, limitándose a decir que iban borrachos.
Menores de edad entre los agresores
La policía no descarta realizar otras detenciones en las próximas horas. Saben quienes son el resto de implicados en la paliza, y solo les falta acabar de atar algunos cabos. Algunos son menores de 18 años, algo que complica la instrucción y la actuación.
La Policía Local de La Coruña pudo identificar a dos de los implicados gracias a los datos aportados por los testigos. Al localizar a algunos de los implicados, les intervinieron los teléfonos. Esto ha permitido ir estrechando el cerco sobre el resto de los agresores.
El hecho de que no conocieran a Samuel desmonta la teoría del delito de odio. Según Lina, amiga de la víctima, «eran personas que buscaban bronca y nos tocó a nosotros». Pero no queda claro que la homosexualidad de la víctima fuera el detonante de la pelea.
Esto impediría aumentar la pena tal y como contempla el Código Penal para los delitos de odio. Como mucho, se podría aplicar un agravante por los insultos homófobos. En todo caso, en la sociedad española hay un clamor sobre la naturaleza de este asesinato.
Muestras de rechazo
Además, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, se ha pronunciado sobre este hecho. Ha llamado «cobardes» a los asesinos y ha especificado que «de momento no tenemos conclusiones sobre la causa de un asesinato como este».
La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, ha pedido prudencia y se ha limitado a definir la acción como «una agresión terrible». Ha confiado en la investigación de la Policía Nacional, y ha prometido «agotar toda la tipología penal para esclarecer los hechos».
«Esto forma parte de algo muy importante para la Fiscalía, la reparación de las víctimas. Vamos a investigar todo y se va a conocer la verdad», ha añadido la fiscal. En las próximas horas se espera que los detenidos pasen a disposición judicial.
Mientras, las muestras de rechazo por la muerte de Samuel se siguen sucediendo en todo el mundo. Rostros conocidos como Ricky Martin, Zara Larsson y Lena Headey han condenado públicamente los hechos. La prensa internacional se ha hecho eco de la noticia.
Por otro lado, hay una iniciativa para cambiar el nombre de la avenida de Buenas Aires por el de Avenida Samuel Luiz. Allí fue donde murió este joven de 24 años, auxiliar de enfermería, que ha removido conciencias en toda España.