Fernando Simón en la rueda de prensa en Moncloa del 10 de noviembre del 2020

El Gobierno responde si será obligatorio vacunarnos contra el Coronavirus en España

Con el anuncio de las vacunas de Pfizer y Moderna, el debate sobre si obligar o no a la población a vacunarse está encima de la mesa

Fernando Simón en la rueda de prensa en Moncloa del 10 de noviembre del 2020
Fernando Simón en la rueda de prensa en Moncloa del 10 de noviembre del 2020 | EFE

Con el anuncio de la vacuna de las farmacéuticas Pfizer y Moderna sobre los buenos resultados de efectividad de su vacuna (92% y 94% de efectividad respectivamente) parece que el momento esperado por muchos está más cerca: el inicio del fin de la pandemia. Las vacunas, según los cálculos de los expertos, podrían empezar a llegar a nuestro país entre finales de diciembre y principios de enero del 2021. Y como siempre, esto plantea un nuevo escenario, ya que una gran parte de la población se ha vuelto muy escéptica con respecto a la vacuna del Covid, por la rapidez con la que se ha desarrollado y no tiene claro si se vacunará.

De hecho, según una última encuesta del CIS, el 43% de los españoles afirma que no se vacunará inmediatamente cuando salga la vacuna, algo a lo que obliga a reflexionar sobre si el Estado podría obligarnos a vacunarnos.

Fernando Simón no está a favor de obligar a vacunar, aunque no lo descarta

A este respecto se ha querido pronunciar Fernando Simón, que ha dado alguna pista sobre la deriva que podría tomar el Gobierno respeto a este tema, en sus últimas declaraciones en televisión.

Simón ha defendido que en España «nunca ha hecho falta hacer obligatorias las vacunas y somos una población muy consciente y consecuente de los riesgos a los que nos exponemos y de los beneficios tanto individuales como poblacionales que nos puedan aportar las vacunas», y que espera que no sea necesario llegar a imponer la vacuna por obligación. Y es que muchos expertos coinciden en afirmar que no sería lo más aconsejable, pues podría producir el efecto contrario al que se busca.

«No sé si va a ser necesario hacerla obligatoria, pero yo espero que no lo sea. Es más, no creo que el hecho de hacerla obligatoria vaya a mejorar esas coberturas», ha explicado.

Por lo que se deduce de sus palabras, la obligación de vacunarse es una opción que sí se ha planteado y que preferiblemente se impondrá si no hay más remedio, como última opción, pues es preferible que la población lo haga voluntariamente.

Y es que este controvertido asunto plantea muchas dudas no solo éticas, sino también a nivel jurídico, ¿se nos podría imponer por ley una vacuna?

Lo que dice la Constitución

La Constitución recoge el derecho a la protección de la Salud Pública como también el derecho a la intimidad y privacidad, dos derechos que chocarían frontalmente en este supuesto.

La Ley 41/2002 Básica de Autonomía del Paciente reconoce el principio de autonomía de la voluntad, el derecho de aceptar o de rechazar un tratamiento o actuación sanitaria, pero también, en los artículos 15 y 43 de la Constitución se defiende el derecho a la preservación de la salud y establece que «corresponde a los poderes públicos  la preservación de la protección de la salud, a través de medidas preventivas». Ante estos dos derechos, ¿cuál prevalecería?

Los expertos en derecho coinciden en afirmar que cuando se ponen en marcha medidas que suponen privación o violación de los derechos fundamentales, se permitiría lealmente si hay un fin proporcional y legítimo, como es la protección de la población ante una epidemia; por lo que en este caso, sería legalmente posible y el Estado se podría amparar en la Constitución.

De hecho, lley 22/1980 prevé que las vacunas contra la viruela, difteria y otras infecciones podrán ser declaradas obligatorias por el Gobierno «cuando por la existencia de casos repetitivos de estas enfermedades o el estado epidémico del momento o previsible se juzgue conveniente», lo que podría por analogía, ser declarado de la misma manera con el coronavirus.