Gerardo Billiris y María Belén Torres

Gerardo, el anestesista que desfiguró a su secretaria: 'Quiero poder criar a mi hija'

Gerardo Billiris ha sido condenado a 14 años de cárcel después de golpear, desfigurar y abusar de su secretaria y de otras dos mujeres

Gerardo Billiris es un anestesista que acaba de ser condenado a 14 años de cárcel. El juzgado considera probado que abusó de dos mujeres y drogó, desfiguró e intentó matar a otra, su secretaria.

El peor de los casos ocurrió en el año 2017 en la ciudad italiana de Palermo, donde Gerardo ejercía de anestesista en el Hospital Militar. Pero los otros hechos por los que se le ha condenado se remontan al 2012. 

En ese primer año Gerardo fue denunciado por una modelo que le acusó de haber abusado sexualmente de ella. También acusó a su compañero, Juan Martín Mercado, relaciones públicas del mismo lugar donde trabajaba. A ambos les acusó también de haberla drogado para cometer los abusos.

La justicia le dio la razón a la joven y fueron condenados: Juan Martín cumplió una pena de seis años de cárcel.

Pero el segundo caso fue el que convirtió este caso en uno de los más mediáticos de los últimos tiempos en Italia. María Belén Torres, que era la secretaria de Billiris, le denunció por drogarla y golpearla brutalmente en su casa. De hecho, le acusó de intentar matarla, lo que llevó a la detención de Gerardo el 31 de enero del 2017.

El caso se hizo especialmente viral porque María Belén hizo públicas las agresiones que sufrió. Publicó en redes sociales cómo había quedado, con la cara completamente desfigurada. Ella tenía 24 años en el momento de la agresión y tuvo que estar varios días ingresada. 

Finalmente, el caso llegó a juicio y Gerardo fue condenado a 14 años de cárcel. Una condena que ahora ha sido confirmada por el fiscal y que pone punto y final a una traumática experiencia para su denunciante.

Durante el juicio, Gerardo Billiris se mostró arrepentido de todo lo que había pasado. "Yo nunca quise hacerle lo que pasó, a nadie se le hace una cosa así", aseguró ante el juez. 

"Quiero poder criar a mi hija y pedirle perdón a la señorita Belén Torres, le pido perdón a ella y a la familia", añadió. Lamentablemente para él, su perdón no fue suficiente para evitarle la cárcel y no va a poder ver crecer a su hija. 

Belén respondió a la petición de perdón de Gerardo y la rechazó de lleno. "Me quiso matar. Creo que lo que quiso hacer fue violarme, pero no lo consiguió, entonces fue a matarme", aseguró ella. 

"¿Qué arrepentimiento le voy a creer? Sabía exactamente lo que hacía", expresó tajantemente a los medios de comunicación. 

Un juicio con contratiempos

El juicio a Gerardo Billiris estuvo rodeado de numerosos contratiempos. En primer lugar, el propio acusado se negó a declarar durante el juicio y solo lo hizo cuando ya estaba por conocerse la condena. 

Se creía que en algún momento iba a hablar durante el proceso, pero al final se mantuvo callado. Su abogado, Marcelo Chumita, aseguró que Gerardo estaba muy delicado de salud y no estaba "anímicamente preparado" para declarar. 

Lo único que logró decir en su favor es que sufría una adicción a las drogas en un intento de encontrar una atenuante. De hecho, alegó que había estado ingresado una clínica durante un año para recuperarse de ese problema.

Pero Gerardo no fue el único que no quiso declarar. Las víctimas pidieron al tribunal declarar a puerta cerrada para no ver ni cruzarse con su agresor. Solo cuando los jueces aceptaron su propuesta, a pesar de la negativa de la defensa, ellas accedieron a declarar. 

Finalmente, Gerardo Billiris tendrá que pasar los próximos 14 años en la cárcel, la pena máxima por los delitos juzgados. Además, será inhabilitado durante 10 años por el intento de homicidio y por haber drogado a sus víctimas con material profesional.