El municipio de Fuente el Saz de Jarama, al noroeste de la Comunidad de Madrid, cuenta sólo con 88 contagios confirmados desde el inicio de la pandemia. Sin embargo, cuando miramos su tasa de incidencia nos salen 657,11 casos por cada 100.000 habitantes, una barbaridad que supone seis veces más incidencia del virus que en la comunidad autónoma.
En la Comunidad de Madrid hay una incidencia de 99,02 casos confirmados por 100.000 habitantes. Uno de sus municipios, Fuente el Saz de Jarama, es uno de los puntos más afectados por el Coronavirus en toda España.
Esta situación complica especialmente la vida a los ancianos en una población con un alto índice de envejecimiento. Allí muchos ancianos afirman que desde que se impuso el estado de alarma han dejado de ir al centro de día y salen muy pocas veces a la calle. Han cambiado las actividades del centro por los ratos enfrente del televisor en casa.
Los vecinos de este lugar lo definen como «el pueblo más tranquilo de Madrid», donde ahora los ancianos pasean con mascarilla y respetando escrupulosamente la distancia de seguridad. «A mí me da calor y seguro que a ti también, pero tenemos que llevarla», dice una de las mujeres mayores del pueblo, que respeta las medidas con gran disciplina.
El último gráfico presentado por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, el 28 de julio, muestra una incidencia de 179,21 casos por 100.000 habitantes en los anteriores 14 días en Fuente el Saz de Jarama, un pueblo de 6.696 habitantes. En una semana la tasa creció hasta los 657. Se cuadriplicó la tasa: antes había 12 casos, ahora 44.
Según datos del ministerio de Sanidad, España acumula en los últimos catorce días una incidencia de 79,82 personas por cada 100.000 habitantes. Es decir, que la afectación del virus en Fuente el Saz de Jarama multiplica por ocho la tasa nacional de contagios en España.
En la última semana, este pueblo ha sufrido un brote de Covid-19 con siete casos positivos y cuatro en seguimiento. Los vecinos afirman no saber dónde se originó y se echan las culpas unos a otros. Los más mayores ponen el foco en los jóvenes: «Todos los fines de semana se van a Valdetorres del Jarama o Algete, que allí hay discotecas».
Se juntan para hacer botellón
La vida en Fuente el Saz de Jarama es muy aburrida, aseguran sus vecinos. Sin embargo, muchos de ellos, temerosos de la escalada de contagios, piden que vuelvan a cerrar los bares y a prohibir las visitas a las residencias.
Uno de los jóvenes del pueblo lo reconoce: «Sí, es cierto que los jóvenes se juntan para hacer botellón, porque me llega por los grupos del instituto». Dice que lo hacen porque «aquí no hay nada que hacer, antes cogíamos un autobús e íbamos a Alcobendas, San Sebastián de los Reyes o Madrid, pero ahora nada».
Otros vecinos aseguran que se respetan las normas de seguridad a rajatabla, pero que «los problemas llegan de noche». El auge de los contagios se nota también en las farmacias, donde cuentan que «la ola de verdad se está dando ahora».
Un vecino del pueblo tiene claro el por qué: «En un pueblo así cada uno tiene su grupo. En cuanto entra el virus es normal que todos se contagien, porque son núcleos muy cerrados». La recuperación en Fuente el Saz parece avanzar a un ritmo más lento que en la comunidad autónoma, a pesar de ser para algunos el pueblo más tranquilo de Madrid.