«Se acabó la pandemia». Es el mensaje de Preben Aavitsland, jefe de infecciones del Instituto Noruego de Salud Pública. Su triunfalismo viene con datos sólidos, que muestran el descenso en picado de los ingresos hospitalarios en su país.
Aunque los gobiernos tratan de mantener un discurso de prudencia, la sensación general es que en efecto la pandemia se ha acabado. Esto no implica que el coronavirus haya desaparecido. Pero sí que podremos convivir con el virus sin sobresaltos.
«Podemos empezar a prepararnos para una vida en la que el coronavirus ocupará muy poco espacio en nuestras vidas», dice el médico noruego. Eso es compatible con su idea de que «la erradicación no es actualmente un objetivo razonable para el mundo».
Aavitsland coincide con la principal teoría de la Organización Mundial de la Salud (OMS), según la cual en el futuro habrá brotes aislados. Asegura que «hará falta varios años porque esto no acaba hasta que no acabe para todos».
España: prudencia y desescalada
El médico noruego es el primero que expone de una forma tan elocuente lo que muchos otros piensan. Que el coronavirus no ha desaparecido, pero sí la pandemia tal y como la hemos vivido el último año. Y eso abre un escenario totalmente distinto.
En España, el Gobierno mantiene esa prudencia instalada en la mayoría de gobiernos europeos. Pero al mismo tiempo, da pasos cada vez más decididos hacia la recuperación de la normalidad. La apertura del turismo y el fin de la mascarilla serán la prueba de fuego.
La desescalada en España ha empezado con algunos repuntes que obligan al Gobierno a tomarse las cosas con calma. Pero el cansancio de la sociedad y la necesidad de recuperar la economía hacen de contrapeso. Y la normalidad vuelve poco a poco, pero sin freno.
La mayoría cree que volverá a la vida de antes
La sociedad comparte en cierta medida esa prudencia. Un 55% de los españoles critican al Gobierno y a las comunidades por no haber tomado suficientes medidas para frenar los contagios. Así lo refleja el último sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
Pero la encuesta refleja otra realidad. El 61% de los españoles creen que podrán volver a hacer vida normal una vez que se llegue a la inmunidad de grupo. La mayoría confía en que todo volverá a ser igual que en 2019.
Según la estadística, al 41% de los españoles les sigue preocupando mucho la situación del coronavirus en España. Y un 15% cree que su vida y sus hábitos no volverán a ser los mismos después de la pandemia.
Pedro Sánchez aún no ha pronunciado la frase «se acabó la pandemia». En Moncloa saben que este optimismo es normal tras un año de confinamientos y con el verano por delante. Y saben también que después vendrá el otoño, y con él el riesgo de nuevas oleadas.
Pero el avance de la vacunación invita al optimismo también de cara al futuro. Con el 70% de la población vacunada a finales de verano, la lógica dice que podremos recuperar la normalidad en gran medida. Entonces sí podrá decirse que la pandemia ha acabado.
Las incógnitas del futuro
Una de las incógnitas será la pérdida de inmunidad un año después de la vacunación. El Gobierno también tiene planteado este escenario. Cuenta con que será necesaria una tercera dosis, y prepara un calendario de revacunación.
Otra de las incógnitas será cómo recuperar la normalidad en las escuelas. La mascarilla y la distancia social seguirán estando presentes. Pero se podrá volver al número de alumnos por clase anterior a la pandemia, y ese es un síntoma más de la vuelta a la normalidad.
Y queda por resolver también la duda de las mutaciones. El virus sigue mutando a medida que avanza la vacunación, y esas nuevas variantes viajan por todo el mundo. Los expertos advierten de que la pandemia no acabará hasta alcanzar la inmunidad de grupo en todo el mundo.
Un futuro sin restricciones ni limitaciones
En el mejor de los escenarios, con la mayoría de la población vacunada y los contagios bajo control, podremos volver a la vida normal. Esto significa comercios y hostelería abiertos sin limitaciones, ocio nocturno, conciertos y eventos deportivos.
La vuelta a la normalidad está más cerca. Hasta ahora, Pedro Sánchez solo se ha atrevido a anunciar «el principio del fin». Pero todo indica que estamos a pocas semanas de poder escuchar la frase que todos esperamos: «Se acabó la pandemia».