La muerte de cinco miembros de una misma familia mientras dormían ha conmocionado a todo un país. El matrimonio Andrade Pérez, y sus tres hijos de 1, 4 y 11 años, han muerto durante un incendio en su domicilio. El fuego ha dejado cinco víctimas mortales y una casa reducida a escombros.
En el inmueble vivían 10 personas, pero durante el incendio declarado de madrugada solo estaban los cinco fallecidos. Él, Rubén Andrade, era un trabajador del campo de 40 años que cuidaba con esmero de su familia. Juana, su mujer, tenía 35 años y era una vecina muy conocida en el lugar.
Rubén y Juana eran muy conocidos en el entorno porque eran muy sociables, y se relacionaban a menudo con sus vecinos. Especialmente ella, que colaboraba con las asociaciones del barrio y participaba activamente de las actividades de la parroquia. Su muerte ha caído como un jarro de agua fría, y aún no se explican lo sucedido.
Los abuelos intentaron salvarles
Los hechos sucedieron el Dos Palos, una ciudad de California con 5.000 habitantes. Se trata de una localidad muy compacta donde todos se conocen y donde existe un gran espíritu de comunidad. Hay una amplia comunidad latina que comparten una misma cultura y una gran creencia religiosa.
En esa comunidad construyeron su familia Rubén y Juana hace más de 15 años, cuando formaron su propio nido. Luego llegaron los niños, uno detrás de otro hasta tres. En el mismo lugar viven sus familiares, que ahora están consternados por el trágico suceso ocurrido en el hogar de los Andrade.
El incendio en casa de los Andrade se convirtió en una trampa mortal de la que tampoco pudieron escapar sus hijos. Las llamas se originaron el jueves 30 de septiembre. El fuego se propagó con tanta virulencia que no estuvieron a tiempo de reaccionar y murieron presos de las llamas.
En la casa de atrás del edificio donde se declaró el incendio viven los padres de Rubén. Al ver el fuego intentaron por todos los medios rescatar a su hijo y a su familia. Pero todos los esfuerzos fueron en vano y las cinco personas fallecieron en el lugar intoxicados por el humo.
Los compañeros de los niños, en shock
Las autoridades de Dos Palos iniciaron una investigación para esclarecer las causas del incidente. Sin embargo, por ahora lo están tratando como un desafortunado siniestro con trágicas consecuencias. No hay indicios de criminalidad, y de hecho la familia Andrade no tenía enemigos.
Donde la noticia ha caído con mayor dolor es en el seno de la familia Andrade. La Cruz Roja, con un equipo de psicólogos y asistencia social, está atendiendo a los familiares que se encuentran destrozados por la noticia. Las autoridades piden respeto a su dolor y privacidad.
La muerte del matrimonio Andrade y sus tres hijos ha sido recibida con una profunda tristeza en toda la comunidad. En especial en la Escuela Unificada de Dos Palos, donde estudiaba uno de los menores fallecidos. El centro ha emitido un comunicado y proveerá servicios de atención psicológica y orientación para los estudiantes en shock.
Los incendios en el hogar, una trampa mortal
Los incendios en el hogar suelen ser una trampa mortal y suceden más a menudo de lo que se piensa. Cualquier descuido puede resultar fatal y desencadenar un fuego que acabe en desgracia. Por eso los expertos recomiendan seguir una serie de recomendaciones.
Es importante no dejar aparatos electrónicos enchufados a la corriente ni velas encendidas. Las estufas y calentadores suelen ser focos principales de incendios en el hogar. Además, dejar colillas encendidas en la cama o en el sofá aumenta el riesgo de incendio doméstico.
Se desconoce cuál fue la causa de las llamaradas que acabaron con la vida de cinco miembros de una misma familia. Lo más probable, según los investigadores, es que fuera pura mala suerte. Un infortunio que ha dejado a toda una comunidad devastada y a una familia hundida.