Hoy ha fallecido en Madrid el periodista y escritor Juan Cueto a los 76 años de edad después de una larga enfermedad tal y como ha informado esta mañana el periódico del que era colaborador 'El País'.
Juan Cueto, una vida dedicada al periodismo y la escritura
Juan Cueto, Licenciado en Derecho por la Universidad de Oviedo, en Ciencias Políticas por la de Argel y en Periodismo por la de Madrid, era conocido por haber sido uno de los grandes comunicadores y columnistas —más influyentes en los años 80 y 90— del periódico El País desde sus inicios en 1975, y así lo informaban a través de las redes sociales.
Además de su carrera profesional como articulista en el periódico, donde fue el primero en hablar de la globalización, el consumo y de las nuevas tecnologías como medios primordiales para acceder a la modernidad, Cueto fue conocido por haber sido el director de Canal+ en sus inicios para la que también trabajó en Italia y Francia, además también colaboraba en la cadena radiofónica Cadena Ser así como colaborador de Radio Nacional de España, de 'ABC' y de otros diarios españoles.
Se le podía considerar un visionario al ver en la televisión de pago el futuro, sin ir más lejos, en una entrevista afirmó: «En otros sitios está el pago total por los servicios, que es donde está la solución, y pongo el ejemplo de las series de televisión, como HBO, donde está la audiencia en este momento y los mejores guionistas, como en 'Mad Men' o 'The wire'».
Descendiente de Leopoldo Alas, Clarín
Como su ancestro Leopoldo Alas Clarín, Juan Cueto también tenía tiempo de dedicarse a la escritura y en su legado ha dejado alguna que otra obra como 'Guía secreta de Asturias' (1974), 'Pasión catódica' (1995) o 'Yo nací con la infamia: La mirada vagabunda' (2012) el último de sus libros.
La modernización de España era uno de sus grandes temas
Para Juan Cueto la tardía modernización de España era un tema que le gustaba abordar y con el que se sentía cómodo al explorar las razones por las que nuestro país había accedido de forma tardía a la modernización mientras en el resto de Europa ya era un hecho más que evidente.
Para dar respuesta a esta duda, Cueto lo achacaba a que las nuevas tecnologías «fueron tomadas por los progres como algo malo, como el diablo, y ese miedo sigue presente en muchos sitios y es una de las características de la modernidad a la española» para luego añadir: «Sí hemos pasado de cero a cien. Pasamos del paletismo total, del desprecio, de tenerle miedo a las nuevas tecnologías a consumirlo todo con un desparpajo como si fuéramos Japón, pero sin pagar»