Según ha informado el medio ‘Perfil’, un bebé de 8 meses ha fallecido a causa de la enfermedad de Kawasaki, una patología infantil que se encuentra relacionada con el coronavirus. Ha ocurrido en el Reino Unido y el bebé fallecido, Alexander Parsons, es la víctima más joven hasta ahora conocida por dicha enfermedad en el país.
Según explican, Alexander no tenía ningún tipo de patología previa ni problemas de salud y todo comenzó al salirse en la piel unas erupciones, que acabaron derivando en fiebre y la inflamación de los ganglios linfáticos.
Al ver las anomalías que sufría el pequeño, su madre lo llevó a un hospital el 6 de abril, donde le diagnosticaron la enfermedad de Kawasaki. Esta enfermedad causa una inflamación generalizada de los vasos sanguíneos y que afecta, generalmente, a las arterias principales y cardiovasculares.
La víctima fue empeorando poco a poco. Fue a finales de abril cuando los doctores comunicaban el fallecimiento de Alexander según el medio ‘Mirror’: «No puedo creer que lo haya llevado conmigo por más tiempo del que ha estado vivo. Nunca estaré completa de nuevo», lamentaba su madre.
La enfermedad de Kawasaki sigue siendo un misterio
Lo cierto es que todavía no se tienen claras del todo las causas de la enfermedad de Kawasaki y los especialistas y estudiosos creen que podría ser causa de varios factores infecciosos, genéticos e inmunes.
La primera vez que se tuvo constancia de la enfermedad fue en 1967, en Japón. Según los estudios realizados es una enfermedad que afecta a los más pequeños, menores de dos años. Los estudios establecen que esta enfermedad crea una erupción cutánea, inflama las glándulas, agrieta o seca los labios, como también afecta de la misma manera a los dedos de los pies, manos u ojos.
Se estudia desde estos últimos meses la posibilidad de que la enfermedad se encuentre relacionada con el Covid-19. El ECDC (Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades) ha manifestado, en referencia a la enfermedad, que: «Se trata de un síndrome inflamatorio multisistémico». Lo que significa que puede llegar a afectar a todos los órganos, y que se encuentra «temporalmente asociado con una infección con el SARS-CoV-2».
Lo que es cierto es que durante la pandemia de coronavirus en el planeta, muchos de los afectados por el síndrome han dado positivo en Covid-19. La hipótesis que barajan los científicos es que los niños que han sido afectados sufran una aceleración del sistema inmunitario. Según han manifestado algunos especialistas: «Tenían el virus, el organismo lo combatió. Pero ahora hay una respuesta inmunitaria diferida y excesiva», en relación a los menores que lo padecen.