Una mujer calienta sus manos sobre un radiadior

La próxima factura de la luz tendrá la mayor subida de la historia

El mes de abril ha alcanzado máximos históricos en cuanto al recibo eléctrico se refiere

A causa de la pandemia el número de horas de la mayoría de rutinas se han trasladado al hogar, un espacio en el que naturalmente la sociedad española no es muy tendenciosa a pasar muchas horas, pero que a causa de las restricciones se han convertido en lugar para todo. Desde el trabajo, el deporte, el ocio a través de dispositivos digitales o la práctica de nuevos hobbies para pasar el rato. Lo cierto es que la mayoría de utensilios que se emplean para este tipo de acciones requieren del uso de electricidad, un hecho que se constata en la mayoría de hogares a través de la factura de la luz.

Lo cierto es que la del mes de abril tiene una peculiaridad, y desde luego no la más grata. El recibo de la luz del mes de abril ha sufrido la mayor subida de la historia, con un 46,4% para el usuario medio. Así lo pormenoriza la organización Facua en un estudio que ha publicado. En análisis de las tarifas indica que con el precio del kilovatio hora de abril, la factura media ascendería a 81,55 euros, en contraposición a los 55,71 euros del pasado curso; ese casi nada son 26 euros de diferencia.

El incremento porcentual es del 70,7%, de los 9,98 euros a los 17,04 del último mes. Facua asegura que en abril de 2020 el kWh alcanzó su mínimo en los últimos 16 años, ya que su cuantía fue fijada en 2004. Según aseguran los expertos en confeccionar este documento aseguran que se debe al precio del CO2 europeo, que continúa siendo determinante para la creación de las diferentes tarifas del mercado energético español.

Es hora de mantenerse

Esta es la afirmación que recomienda Facua a los usuarios, ya que podrían caer en la trampa de contratas tarifas de libre mercado. Una de las recomendaciones que realizan es la de darse de alta en el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor, PVPC, en el que se abre la variante de empresas comercializadas directamente por el Gobierno.

Según apunta este estudio a través de esta medida se pueden optar por las tarifas más competitivas de carácter general y que, incluso llega a estar por encima de algunas ofertas del mercado libre en algunos meses.

Desde la organización reguladora se lamenta que desde el entramado político no se agilicen los trámites para el cumplimiento de los compromisos programáticos. Esta serie de medidas fueron propuestas por PSOE y Unidas Podemos al inicio de la legislatura y tienen como finalidad reducir el precio del término de potencia.

La repercusión en el ciudadano

Esta nueva propuesta permitiría un precio más reducido para los primeros kWh consumidos y la eliminación de la retribución que reciben en el mercado mayorista algunas tecnologías específicas que estaban sometidas a un marco regulador diferente. Este otro espectro de cobro se situó en base a una serie de infraestructuras de necesaria construcción que permitirían abastecer al consumidor en diferentes regiones. 

A pesar de ello Facua asegura que el coste de todas estas tareas se ha «recuperado sobradamente» en cuanto a costes de inversión se refiere. Otro de los motivos fundamentales que reclama la asociación son los impuestos indirectos que se aplican en la factura eléctrica de las familias. El IVA total que se determina sobre esta clase de recibos es del 27%, ya que se suma el IVA general del 21 con el impuesto especial sobre electricidad.

Otra de las propuestas que sugiere la organización es una reforma del bono social para que la cantidad de beneficiarios sea mayor y así aumente el descuento que representa sobre la tarifa semirregulada PVPC.