El futbolista holandés Quincy Promes, que jugó en el Sevilla en la temporada 2018-2019, está acusado de intento de asesinato. La fiscalía de su país le acusa de haber apuñalado a su primo durante una reunión familiar el año pasado. Ahora han accedido a conversaciones en las que el jugador admite los hechos.
Los hechos ocurrieron hace unos meses durante una fiesta en la que había varios familiares del futbolista. En un momento dado, Promes acuchilló a su primo y lo hizo, presuntamente, de forma premeditada. La policía ha obtenido una conversación del futbolista con su padre en la que confiesa lo ocurrido.
El caso podría ocultar una realidad aún más terrible, ya que según apuntan Quincy Promes podría estar vinculado al crimen organizado. El jugador fue arrestado en diciembre de 2020 y ahora tendrá que ir a juicio acusado de un delito muy grave. La confesión del jugador a su padre confirmaría definitivamente su autoría.
La confesión de Quincy Promes
Quincy Promes, que fue futbolista del Sevilla y ahora está en el Spartak de Moscú, está siendo procesado por un caso de internto de asesinato. El holandés habría apuñalado a su primo durante una fiesta en la que estaban otros miembros de su familia. A la espera del juicio, se han conocido nuevos detalles.
La policía holandesa ha conseguido acceder al móvil de Promes y localizar una llamada en la que confiesa los hechos a su padre. Según desvela NOS, el deportista habría admitido ser el autor material de la agresión con cuchillo de la que fue víctima su primo. Además, en la confesión revela cómo lo planeó todo.
En la conversación se escucha a un Promes muy nervioso, confesando lo ocurrido a su progenitor. “Si hubiera estado tan borracho, lo habría hecho al comienzo de la fiesta. Esperé bien el momento”, explica. La acusación tiene claro que se trata de un intento de homicidio con premeditación.
Hasta cuatro años de cárcel
Quincy Promes fue procesado por intento de homicidio en noviembre de 2021 ante la sorpresa del mundo del fútbol. La Fiscalía de los Países Bajos anunció su imputación por el apuñalamiento de su primo. “Tuvo lugar después de una fiesta y la víctima sufrió graves lesiones en una rodilla”, explicaron.
El futbolista se enfrenta a una pena de hasta cuatro años de cárcel por el incidente. Según lo que ha trascendido, se encaró con su primo con un cuchillo por haberle robado dinero a otro miembro de la familia. La intervención de otros miembros de la familia evitó una tragedia mayor y la víctima sólo resultó herida.
Víctima y agresor habrían intentado llegar a un acuerdo económico ya que el incidente impidió al agredido seguir con su trabajo. Pero una pista permitió a la policía detener a Quincy Promes e interrogarle por lo ocurrido. Inicialmente quedó en libertad, pero la causa acaba de dar un giro.
Su club guarda silencio
La intervención del teléfono del exsevillista habría permitido obtener una confesión que sería crucial de cara al juicio. El abogado del primo de Promes desliza que el deportista estaría relacionado con alguna banda del crimen organizado en Holanda. “Su papel o la relación aún no la conocemos”, ha añadido.
Por su parte, la defensa se mostró confiada en la absolución de su cliente a pesar de las nuevas pruebas. El caso ha generado un gran revuelo en el país del futbolista. En el Spartak de Moscú guardan silencio, pero en plena crisis ucraniana el club ruso podría facilitar la salida de Quincy Promes.
El extremo neerlandés, dotado de unas indudables cualidades futbolísticas, siempre ha estado envuelto en la polémica. Su paso por el Sevilla dejó un buen recuerdo para los aficionados, y después se fue al Ajax antes de acabar en Moscú. A pesar de su situación jurídica, no ha dejado de jugar al fútbol.
Internacional con su país
Sin ir más lejos, este fin de semana anotó el gol de la victoria de su equipo en el derbi moscovita contra el Dinamo. Promes puede jugar de extremo o de mediapunta y posee un gran dominio del balón con las dos piernas. Además es un jugador muy rápido capaz de eliminar rivales con su regate.
En su palmarés consta el haber sido internacional con los Países Bajos hasta 50 veces, en los que ha anotado siete goles. Defendió la camiseta de la selección de su país en la última Eurocopa, en verano del año pasado. Desde entonces no ha vuelto a ser convocado, y su situación penal complica su futuro.