El auge de la variante Ómicron desde hace unas semanas en España ha provocado la psicosis en muchos ciudadanos. Tras una aparente tranquilidad vivida durante el otoño, Ómicron ha creado un estado de nerviosismo entre la población. Y cada vez son más habituales aquellos que se compran un test de antígenos para comprobar si están contagiados.
Hubo muchas dudas al respecto de si las pruebas utilizadas hasta ahora servían para detectar esta nueva variante. El caso es que un estudio de la Universidad de Cape Town (Sudáfrica) sugiere que la fiabilidad de los test con saliva es del 100% frente al 86% de los nasales.
Apunta esta investigación inicial que no todos los test poseen la misma eficacia. Y han comprobado cómo los de saliva tienen más fiabilidad con Ómicron que los nasales.
Para llegar a estas conclusiones, han analizado a un total de 382 pacientes con coronavirus. Y se han calificado sus muestras según si estaban contagiados por Ómicron o Delta.
Estás haciendo mal el test de antígenos en casa (y no lo sabías)
Los investigadores apreciaron que el porcentaje de casos positivos por la variante Delta tras la toma de muestras de saliva y nasal fue del 71% y del 100%. El caso es que para Ómicron no es nada parecido.
Con esta contagiosa variante, los resultados son que los casos positivos por Ómicron se detectan por la saliva con una fiabilidad del 100%, pero con un 86% por hisopos nasales.
Sobre ello, los autores apuntan que "el patrón de diseminación viral durante el curso de la infección se altera para Ómicron en mayor medida en la saliva en comparación con las muestras nasales. Lo que resulta en un mejor rendimiento diagnóstico de los hisopos de saliva". Podría ser así según los autores del estudio, a que la nueva variante posee una mejor replicación viral en el tejido del tracto respiratorio superior.
Así, aparte de sudores nocturnos, fiebre y congestión, uno de los síntomas más frecuentes que se está viendo con esta variante es el dolor e irritación de garganta. Por contra, es menor la incidencia en los pulmones, como sucedía con la anterior variante.
Lo que desvela un estudio sobre los test PCR con saliva
A su vez, otro estudio publicado hace un mes en Journal of Clinical Microbiology ya reflejaba algo significativo. Un test de PCR con saliva podía identificar un positivo por SARS-CoV-2 hasta 4,5 días antes de ser detectado por un test de antígenos nasal.
Esto podría ir a más con la nueva variante. Ya que la forma que tiene de infectar cambia sustancialmente y podría detectarse más rápidamente a través del análisis de muestras de la garganta.
"Ahora está bastante claro que Ómicron es una bestia muy diferente. Las muestras de saliva son mucho mejores para detectar el coronavirus", exponía el epidemiólogo Eric Ding. Y lo reflejaba a través de su cuenta personal de Twitter.
La efectividad real de los test de antígenos
Sanidad fija en su protocolo que los test rápidos deben hacerse para detectar solo casos sospechosos. El motivo es que, aunque estos test tienen una elevada fiabilidad, podrían dar falsos negativos.
Desde la AEMPS sostienen que aunque el test solo enseñe la línea de control y sea, en teoría, negativo, "no excluye la posibilidad de infección". Por tanto, si se cree que se ha tenido contacto con un positivo, es aconsejable empezar el autoaislamiento y hablar con los servicios sanitarios.