España todavía no está preparada para levantar el confinamiento decretado el pasado sábado 14 de marzo. Para que esto sucediera, nuestro país tendría que cumplir con los seis criterios que marca la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La primera premisa es que la transmisión del coronavirus esté controlada. «Es necesario esperar un par de semanas y comprobar que en ese tiempo la tendencia continúa», asegura Joan Ramón Villalbí, miembro de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria ('SESPAS').
La segunda condición es que los sistemas de salud deben poder «detectar, probar, aislar, tratar cada caso y rastrear cada contacto». Según Villalbí, «hay que reforzar los servicios de vigilancia epidemiológica sabiendo lo que ahora sabemos: que la infección se transmite en periodo de incubación y que hay personas que lo transmiten sin llegar a ponerse enfermos nunca», asegura el doctor.
La OMS considera importante minimizar los contagios en las residencias
Sobre el tercer punto marcado por la OMS, la Organización habla de las residencias de mayores e indica que en estos entornos debería haber una minimización de contagios. Con esta epidemia, «hemos visto que muchas de ellas tenían poco apoyo sanitario y estaban poco preparadas. Estamos en un proceso en marcha para la reorganización de estos centros», señala Villalbí.
La cuarta premisa se refiere a comprobar si «las escuelas, los lugares de trabajo y otros lugares esenciales han establecido medidas preventivas». Aunque los centros están cerrados «en lo que sí está funcionando, se está velando por cumplir las medidas de distancia física, más personal teletrabajando e implementando otras medidas de protección. Este será el camino e iremos viendo cambios en el supermercado, en las bibliotecas, en la cultura...», explica Villalbí.
«Tardaremos en abrir los puertos y aeropuertos», avisa Villalbí
En cuanto a la quinta de las condiciones recomendadas por la OMS, versa sobre poder gestionar el riesgo de importar nuevos casos. Referente a ello, pronostica Villalbí «que tardaremos en abrir los puertos y aeropuertos».
El sexto y último punto radica en que la ciudadanía esté educada, comprometida y capacitada para vivir bajo una nueva normalidad. Aunque para Villalbí, «estamos viviendo un confinamiento más extremo que otros países que está siendo muy respetado, y según las encuestas, la gente lo entiende y lo apoya, habría que ver hasta qué punto mantendremos las conductas que nos protegen al reanudar actividades suspendidas para evitar la transmisión», finaliza.