Todos estamos advertidos de que saltarse las normas de confinamiento supone poner en grave riesgo la salud de los demás.
También somos conscientes de que incumplir las restricciones están castigadas con elevadas sanciones económicas que pueden ser interpuestas por las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Pero ¿qué sucede cuando las autoridades se exceden a la hora de imponer una multa?
Este es el caso de un transportista de Torrelavega, en Cantabria, que a pesar de estar trabajando fue multado por la policía local con 1.500 euros.
Sancionado al repartir material sanitario
La noticia ha sido compartida en Twitter por un vecino indignado que grabó la escena desde la ventana de su casa. En ella podemos ver como un policía, con actitud chulesca, le comunica al repartidor que será sancionado con 1.500 euros por estacionar mal el vehículo.
A pesar de que el repartidor insiste en que está trabajando intensamente en la distribución de material sanitario, el policía continúa rellenando la denuncia.
El hombre empieza a ponerse nervioso al ver que su explicación de nada sirve. «Yo estoy trabajando igual que vosotros. Multadme, eso que siempre hacéis» señala el repartidor muy alterado.
Estas declaraciones nos hacen pensar que el trabajador conoce al policía local, que probablemente lleve muchos años desempeñando su labor en la localidad. De hecho, el vecino que comparte el vídeo a través de Twitter no duda en señalar que es «el típico municipal que ya conocen en todo el pueblo».
De nada sirvieron las explicaciones del hombre, que acabó diciéndole al policía: «Eso es lo que quieres tú, luchar». A lo que el oficial le contestó manteniendo su tono amenazador y paternalista: «No, lo que quiero es que te comportes».
Agresiones policiales
En los últimos día han sido muchos los usuarios que han compartido en redes sociales actuaciones policiales más que polémicas.
Multas abusivas, detenciones precipitadas y agresiones injustificadas son algunos de los vídeos que se han viralizado principalmente en Twitter. Muchos usuarios consideran que algunos miembros de las Fuerzas de Seguridad aprovechan su autoridad para excederse con los ciudadanos.