En San Petersburgo, Rusia, un hombre encontró el cadáver de una mujer que había sido enterrada con vida en un bosque que se encontraba cerca de la ciudad.
La víctima, que todavía no ha sido identificada, había sido soterrada parcialmente una semana antes, tan solo dejando su cabeza por encima de la tierra.
Según las autoridades, la mujer rondaba los 40 años y quien la enterró lo hizo con la intención de que muriese. El medio británico 'Daily Mail' señaló que la víctima vestía un chándal cuando fue soterrada y en sus bolsillos hallaron una cadena de oro.
El cadáver fue encontrado a 500 metros de la principal carretera que conecta el suburbio de Yuntolovo con la ciudad de San Petersburgo y la principal hipótesis que se baraja que es que la víctima fue enterrada con vida hace una semana y que a pesar de sus intentos de salir, no lo logró.
Encontraron el cuerpo sin vida de la mujer con varias heridas en la cabeza y están realizando la autopsia que determinará la causa exacta de la muerte y que podría ser un factor clave para buscar al posible —o posibles— sospechosos que enterraron a la mujer.
Abandonan y entierran a un bebé recién nacido
El caso de esta mujer ha recordado a uno similar que tuvo lugar en la India hace tan solo unos días. Allí, una familia abandonó a un bebé recién nacido y lo enterró bajo tierra en un campo en Khatima, Uttarakhand.
El menor fue encontrado por un trabajador del campo que se disponía a realizar su jornada de trabajo, identificado como Kundan Singh Bhandari, que descubrió la cara del niño entre la arena. Rápidamente el hombre avisó a otros lugareños y a las autoridades y se consiguieron rescatarlo.
Según el informe, el niño apenas tenía unas horas de vida, sufría de hipotermia, tenía dificultades para respirar y estaba cubierto de barro y suciedad.
El bebé fue trasladado de urgencia al hospital, donde consiguieron estabilizarle. Después de su recuperación, el niño fue adoptado por una mujer de la localidad.
Este no es el único caso así que ha sucedido en este país. En la ciudad de Bareilly, situada en el estado de Uttar Pradesh, una niña prematura fue encontrada enterrada en una olla de barro. La pequeña fue descubierta por un hombre que iba a enterrar su hija fallecida.
«Había ido a enterrar a su propia hija y estaba excavando la tumba cuando su pala dio con un vasijo de barro», explicó Shailesh Kumar Pandey, superintendente de la policía de la ciudad. Aunque intentaron localizar a los padres de la menor, no lo consiguieron y la pequeña fue puesta en adopción.
Otra niña de tres semanas también fue enterrada con vida y consiguió sobrevivir durante por lo menos tres horas a una temperatura de 3ºC hasta que los lugareños consiguieron escuchar sus llantos débiles debajo de la tierra. La pequeña fue trasladada rápidamente al hospital y consiguió sobrevivir.
Caso similar en Zambia
En el país africano de Zambia también sucedió un caso parecido. Un menor falleció después de que un colapso en la orilla del río Luangwa, situado en el distrito de Isoka de la provincia de Muchinga, le enterrase vivo.
El pequeño se encontraba junto otros niños de su familia y mientras que las otras tres personas lograron escapar, Meckson Munkdondya —como se le ha identificado— no lo consiguió y falleció en el momento.
Los otros menores de nueve, diez y doce años, intentaron ayudarle, pero ya era tarde. Joel Njase, policía de la provincia de Muchinga, determinó que la muerte del pequeño había sido un accidente.