Un centro comercial lleno de gente y decoración navideña

Las empresas aclaran si habrá juguetes y bebidas para Navidad

La crisis mundial de suministros genera preocupación entre los consumidores españoles, ante la posibilidad de quedarse sin sus compras

Los grandes almacenes, supermercados y jugueterías aclaran las dudas sobre una posible Navidad sin juguetes ni bebidas. La complicada situación provocada por la falta de suministros a nivel mundial ha hecho saltar las alarmas entre los consumidores. Esto ha obligado a los grandes comerciantes a reaccionar ante una campaña navideña necesaria para sobrevivir. 

La falta de suministros en España

Es probable que algunos ya hayan vivido situaciones similares. Vamos a nuestro supermercado habitual, entramos en el pasillo donde sabemos que está ese producto que nos interesa comprar y, ¡sorpresa! Ya no queda, y no parece que lo vayan a reponer.

Lo mismo ocurre en los concesionarios de toda España, donde el tiempo de entrega de nuevos vehículos se ha incrementado notablemente. Según relata El País, a Diego, que quería comprarse un coche nuevo en Madrid, le ofrecían uno de gama inferior y otro de superior al que quería. 

Calle de Madrid repleta de gente
El centro de Madrid en una tarde de compras y grandes aglomeraciones | EFE

 

En plataformas populares como Wallapop las consolas PlayStation 5 se venden a precios estratosféricos, casi el doble del original. "No se consiguen y no van a llegar hasta mediados de marzo", asegura un vendedor al mismo medio. 

Lo cierto es que la sensación de que faltan productos nos resulta un pelín rara, pero es una realidad. Los expertos lo achacan a varios problemas: puertos colapsados, falta de camioneros y barcos sobrecargados. Además, los problemas en las fábricas asiáticas y la demanda desbocada tras la pandemia, especialmente en Estados Unidos, han sorprendido a todo el mundo. 

 

¿Están los regalos de Navidad en peligro?

En la lista de productos que más difícil se hace conseguir encontramos los materiales de construcción, los automóviles, las bicicletas, el papel, las bebidas o los juguetes. También se hace crónica la falta de 'stock' en el caso de las videoconsolas y muchos otros productos electrónicos. En este sentido, las patronales españolas insisten que se trata de casos puntuales y que la gran mayoría ni lo notará. 

Es decir, descartan una Navidad con estanterías vacías de forma generalizada. Si llegase a faltar un producto, aseguran que habrá otro para ocupar su lugar. En un gran almacén de juguetes de Sevilla, sin embargo, no lo tienen tan claro. 

Regalos de color rojo al lado de un árbol de Navidad
Los regalos de Navidad no están en peligro este 2021 | GTRES

 

En un gran almacén de juguetes de Sevilla, que sí reconoce que en un año normal tendría muchos más juguetes disponibles, coinciden en lo mismo. "Creo que se está alarmando demasiado. Producto hay; aconsejamos que adelanten un poco las compras, pero si no hay una muñeca habrá otra", aseguran. 

Por su parte, en declaraciones a El País, desde la patronal de grandes empresas de distribución (ANGED) "se descarta absolutamente un desabastecimiento". Reconocen que puede haber falta puntual de producto, pero afortunadamente el sector trabaja con "muchísima previsión", ya que se juegan gran parte de sus ingresos.

Imagen de una calle repleta de gente durante las Navidades con una estantería vacía
Imagen de las estanterías vacías en un comercio | La noticia digital

"En este momento no prevemos desabastecimiento de ninguna categoría". Es lo que aseguran voces internas de las grandes cadenas de supermercados y centros comerciales. 

Los supermercados piden mantener la calma: están preparados

Si los juguetes están asegurados, ¿qué pasa con la comida? Desde la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados (ACES) insisten en que no hay motivo para pensar en un desabastecimiento.

"Nuestras empresas están perfectamente preparadas y el abastecimiento en las tiendas está permanentemente garantizado en cualquier región", explican. Reconocen que puede haber episodios muy puntuales de falta de algún producto concreto, pero lo achacan más a un problema logístico. 

Carro de la compra en un supermercado
Lo supermercados insisten en que están preparados para la Navidad | PIXABAY

 

Un caso muy llamativo es el de la ginebra neoyorquina Seagram's, propiedad de Pernod Ricard. La marca, lejos de ocultas sus problemas, ha hecho de la escasez un reclamo para volver con más fuerza. Otras bebidas que enfrentan problemas son la ginebra Beefeater o la vodka Absolut. 

La patronal, en este caso, culpa de la falta de suministros a los problemas de transporte marítimo, a la falta de almacenamiento y a los picos de demanda. En este caso, la apertura progresiva de los locales de ocio nocturno ha disparado compra de este tipo de productos. "Hubo un efecto llamada, similar al del papel higiénico al principio de la pandemia", reconocen, si bien insisten que los problemas afectan a menos del 10% de las marcas actualmente. 

El sector del automóvil, uno de los más castigados

En donde sí se notan los efectos de la crisis es en el sector del automóvil. La falta de microchips ha frenado las plantas en seco, y los plazos de entrega de nuevos vehículos han aumentado mucho.

Hay listas de espera de hasta un año para comprar un coche nuevo, por lo que muchos clientes han acudido al mercado de segunda mano. Otras opciones exploradas por los consumidores son los servicios de 'renting' o alquiler de vehículos, aunque estos sectores también se han visto 'contagiados'.

Imagen del interior de un vehículo
El sector del automóvil sí que enfrenta problemas por la crisis mundial de microchips | Pixabay

 

Por lo que respecta a los productos electrónicos, en este caso ocurre algo muy curioso. Si bien la falta de microchips ha ralentizado la producción, las ventas se han disparado. Solo la PlayStation 5 ha vendido ya más de 13 millones de unidades en todo el mundo, y Apple también registra vendas muy importantes.

En conclusión, el mensaje de los grandes distribuidores es el mismo. No parece que vayamos a vivir una Navidad apocalíptica y sin regalos ni bebidas en España.

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