La del domingo fue sin duda una jornada calificada por muchos como histórica pero sobre todo muy emocionante en nuestro país. Y es que después de meses de la angustia vivida y causada por la pandemia de coronavirus por fin se recibía un poco de esperanza. La vacuna había llegado a España y se empezaban a administrar las primeras dosis en las residencias de ancianos.
La escogida para esta imagen icónica fue la residencia de mayores de 'Los Olmos' de Guadalajara. En ella se vacunaron las dos primeras personas en España: Araceli, de 96 años, la primera española en hacerlo, y Mónica, de 48, la primera sanitaria vacunada.
Esta última lanzaba uno de los mensajes más emotivos que se recogieron a lo largo de la larga jornada de vacunación en España. Tras recibir su dosis sobre las 09.05, cinco minutos después de Araceli, y tras esperar los minutos correspondientes para comprobar que no sufría ningún efecto secundario inmediato, como mareos o alguna hinchazón, la sanitaria atendía a los medios, concretamente a RTVE, todavía «nerviosa», como ella había confesado justo antes de ser vacunada.
Y eso que el hecho de saber que sería una de las dos primeras personas en España contra el covid fue casi un regalo de Navidad. «El día de Nochebuena me lo propuso la directora y yo le dije que sí sin ninguna duda», explicaba. Además se mostraba muy contenta, ya que «es un paso muy importante que había que dar. Es un orgullo que la directora pensara en mí».
Pero realmente lo que le quiso demostrar es la necesidad de concienciar a la población que es urgente vacunarse, cuando a cada uno le llegue el momento, sobre todo después de lo vivido en las residencias. No dudo en acordarse, muy emocionada, de todos aquellos que perdieron la vida a causa del covid en la residencia en la que trabaja desde hace 10 años.
La dura realidad vivida en la primera ola
Como muchas otras fue muy golpeada durante los primeros meses de la pandemia. Explicaba como esos momentos de cierto descontrol fueron «durísimos». En la residencia de mayores 'Los Olmos' murieron 13 ancianos y otros 11 con síntomas compatibles, pero que no llegaron a ser confirmados a través de una prueba PCR.
Y una de las cosas que más lamenta es los familiares de estas personas no se pudieran despedir de ellas. «Han muerto sin el calor de sus familias y eso ha sido un poco triste», lamentaba. Eso sí, explicaba que ellos tuvieron que hacer ese papel, aunque no es lo mismo: «Nos han tenido a nosotros, pero al fin y al cabo no han tenido el calor de sus familiares».
Tras una primera ola demoledora, en este centro la situación en los últimos meses es mucho mejor. Ya no tienen esa presión encima y están mucho «más tranquilos», como confesaba Mónica. Y es que desde julio no tienen ningún contagio, uno de los motivos por los que la residencia 'Los Olmos' fue una de las escogidas para administrar las primeras dosis de la vacuna en su comunidad y en concreto en toda España.
Pese a ello la sanitaria sabe que la pandemia todavía no ha acabado y que la llegada de la vacuna no es más que el principio del fin como se ha venido diciendo en las últimas horas. Por ese motivo hacía un llamamiento a la «población a que se vacune porque creo que es importante. Es una vacuna como otra cualquiera». «La gente se puede vacunar sin problema porque no se nota nada», decía apara quitar el miedo que existe entre los españoles a los posibles efectos secundarios.