Carmen, la española que acabó en silla de ruedas por culpa de su marido

El ejemplo de Carmen, la atleta española a la que su marido dejó en silla de ruedas

Ha sido gracias al deporte que ha podido superar también la pérdida de su hijo

El relato que hace Carmen Giménez de todo lo que tuvo que vivir hace unos años es un ejemplo claro de que pese haber sido víctima de un maltratador, sí se puede salir de haber vivido un episodio terrible que sin duda marcó el resto de su vida. Y es que Carmen ahora lo explica como si fuera lo más normal del mundo, pero es increíble ver como se ha podido superar una vez acabó en silla de ruedas después del que entonces era su pareja la lanzará por una ventana desde un tercer piso. 

Ese terrible momento no solo le provocó que ya no pudiera a caminar y que la silla de ruedas se convirtiera en un objeto indispensable para ella. Pero no es solo eso lo único que ha tenido que afrontar en todos estos años. Tuvo que ver como las instituciones no trataron su caso como se merecía, además en otro incidente totalmente evitable, tuvo que ver como perdía a un hijo de forma prematura. 

La manera con la que ha sabido sobreponerse a todos los golpes que le ha dado la vida estos últimos años ha sido sin duda el deporte. Aprovechó la pérdida de su pequeño para ponerse a correr y convertirse en toda una atleta paralímpica. Y no solo ha conseguido competir para ella misma, sino que también ha empezado una iniciativa para que el deporte adaptado llegue a muchas otras personas. 

Las desgracias que encaminaron su vida hacía el deporte 

El episodio que empezaría a cambiarle la vida tuvo lugar el año 2010. Fue entonces cuando su maltratador fue un paso más allá y le produjo la lesión medular que la acabaría dejando en silla de ruedas. Estaba siendo una discusión más con su expareja mostrando su violencia, aunque hubo un momento en que aparentó calmarse y simuló irse de casa. 

Con el susto en el cuerpo, Carmen estaba encerrada en el baño. Cuando salió de su encierro, engañada pensando que la amenaza ya no existía, se vio sorprendida por él y comenzó la agresión. Ella no recuerda con detalles lo que pasó ni como fue la caída desde tres pisos que le acabó la lesión medular. Tuvo la suerte de sobrevivir pero realmente no pudo evitar sufrir una lesión que le cambiaría la vida.

Desgraciadamente, ese no fue el único maltrato que acabó viviendo en los años siguientes. Tuvo que sufrir la desconfianza de las autoridades donde denunció su situación, pese a la intervención policial y de las urgencias no se investigó el episodio que quedó finalmente archivado. 

El informe policial recogía que tenía «facilidad para entablar relaciones personales con hombres». Denuncia los estereotipos que se utilizaron en su caso. Analizaron su poder económico como el de su pareja, y llegaron a la conclusión que ni ella cumplía con el perfil de víctima ni él con el de maltratador. Ella misma explicaba, en 'Informativos Telecinco', como le ha costado diez años hablar sobre todo lo que vivió. 

Pero pese a todo, eso no fue el único mal trago que tuvo que vivir. Primero tuvo una hija y después se quedó embarazada del que iba a ser su hijo Bruno. Se le adelantó el parto y pese a llamar 4 veces a emergencias nadie acudió. El niño nació sin la asistencia adecuada. Una investigación policial confirmó que había en esos momentos 7 UVIS móviles disponibles. 3 médicos serán juzgados por homicidio por imprudencia. 

El fallecimiento de Bruno hizo que quisiera volver a correr y que creara 'Run for you'. Esta iniciativa se dedica a fomentar carreras solidarias para ayudar a otras personas. Con 41 años, sus esfuerzos se centran en ella y en la competición.