Los Mossos de Esquadra han detenido este jueves, 8 de abril a dos mujeres como presuntas autoras de la muerte de un bebé. Las arrestadas tienen 42 y 20 años, de nacionalidad española y son vecinas de Tarragona. Los hechos habrían tenido lugar en la misma ciudad en marzo de 2020.
La policía catalana inició la investigación el pasado 4 de diciembre de 2020, cuando agentes de la Unidad Investigación de la comisaría de Tarragona recibieron una información según la cual la mujer más joven, de 20 años, estuvo embarazada y podría haber tenido un bebé hacia marzo del mismo año, y que entre ella y su madre se lo habrían matado. Posteriormente, las dos mujeres se habrían deshecho del cuerpo del bebé recién nacido.
Cuatro meses después, la investigación de los Mossos ha concluido que las dos mujeres habrían causado la muerte al bebé. Por este motivo, este jueves las han arrestado en la misma ciudad de Tarragona, donde viven. El caso está bajo el secreto de las actuaciones.
Según avanza el digital El Caso, madre e hija hicieron desaparecer el cuerpo del pequeño, que un año después aún no ha aparecido. Todo parece indicar que las dos mujeres tiraron el cadáver en un contenedor.
Ahora la policía espera poder saber qué pasó con el cuerpo del bebé. La investigación se inició gracias a un aviso. Fue una persona cercana a la familia quién alertó que la chica de 20 años habría sido madre y que el recién nacido habría sido asesinado al nacer.
Pese a que la policía no ha querido contar detalles, las investigaciones se han alargado durante un año, tiempo de sobras para que la policía catalana haya podido corroborar que la mujer de 20 años habría dado a luz y habría sido ayudada por su madre para acabar con la vida de su hijo y nieto respectivamente.
Es la comisaría central de Tarragona de los Mossos de Esquadra la que ha liderado las actuaciones. Ahora, una vez finalicen las diligencias policiales, las dos mujeres serán entregadas al juez, quién decidirá si las deja en libertad con cargos o las hace ingresar en prisión preventiva.
Como era de esperar, el caso ha causado mucho revuelto en Tarragona ciudad.