En la piscina natural de Hermigua, en La Gomera, se vivió un episodio trágico el pasado domingo 13 de marzo. El Centro Coordinador de Seguridad y Emergencias de Canarias 112 informó de la muerte de una niña alemana de tan solo nueve años. Junto a ella se encontraba su padre, un hombre de 56 años que fue arrastrado por una ola.
Ambos fueron trasladados al hospital de manera inmediata. Sin embargo, la menor no había perdido la vida tal y como informaron desde el 112. Su padre, en cambio sí que falleció por ahogamiento.
Padre e hija fueron arrastrados por las olas
La desesperación se apoderó del equipo de emergencias trasladado a la zona de El Pescante en La Gomera. Allí, localizaron los cuerpos de una niña y de un hombre en el interior de la piscina natural de Hermigua.
La zona estaba cerrada por peligro de desprendimiento y salvamento no dudó en lanzarse al mar para tratar de salvarles la vida. Uno de los agentes de la Guardia Civil nadó cerca de sesenta metros hasta la niña y el padre.
Una vez en el interior de la piscina, el oleaje impidió el rescate por mar y el agente optó por intentar mantener la cabeza de la niña fuera del agua. Cerca de ellos, en las rocas, se encontraba otro agente que ayudó a sacarla de la piscina natural.
Una vez fuera, le realizaron las maniobras de reanimación logrando que expulsara el agua y recuperara los signos vitales. Minutos después, una ambulancia trasladó a la menor al Hospital de La Candelaria, en Tenerife, en estado crítico.
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Más tarde, un helicóptero de Salvamento Marítimo rescató el cuerpo sin vida de su padre, quien había sido arrastrado por una ola.
Comunican la muerte de la niña de nueve años por error
El Centro Coordinador de Seguridad y Emergencias de Canarias ha tenido que rectificar al comunicar por error la muerte de la niña. La menor de origen alemán, fue dada por muerta cuando en realidad se encontraba en estado crítico.
Su padre, en cambio, un hombre de 56 años que también se encontraba en la piscina natura sí que terminó perdiendo la vida. El balance de muertos por ahogamiento en Canarias se ha tenido que volver a contabilizar con un total de cinco fallecidos.
La mayoría de los ahogamientos tienen en común la imprudencia. Los avisos por fuerte oleaje estaban vigentes y los bañistas hicieron caso omiso adentrándose en el mar. El pasado fin de semana, los fuertes vientos y las olas de hasta cinco metros provocaron una alerta del Gobierno canario.
De hecho, el 80% de las muertes por ahogamiento son causadas por los bañistas que se meten en el mar con las aguas en muy mal estado. Un gran número de ellos, son extranjeros. "Mayoritariamente, las víctimas mortales implicadas en los incidentes del pasado fin de semana eran extranjeras", explican.
Desde Canarias, insisten en que sus costas "no son peligrosas", pero que hay que tener en cuenta los avisos por corrientes o mal oleaje.
Otra de las cosas que hay que tener en cuenta son los peligros que se esconden en las piscinas naturales. Para quien no conozca el comportamiento de sus corrientes, se pueden convertir en auténticas "trampas mortales", advierte Sebastián Quintana.
De igual modo, también resaltan los peligros que se esconden en las zonas rocosas de las costas. El oleaje suele ser más intenso en esos lugares y se corre el peligro de ser arrastrados por las olas y las corrientes. Además de sufrir fuertes traumatismos que podrían provocar conmociones y con ello, la muerte.