Este domingo salía a la luz una noticia con respecto a una anciana en una residencia de ancianos que, se había dado por fallecida, y diez días más tarde apareció viva en una residencia de Ourense. Si bien al principio la historia puede parecer mucho más compleja de lo que es, lo cierto es que también ha dejado una parte amarga en los familiares de la víctima que falleció realmente.
El relato comenzó con una anciana que contrajo el Covid en una residencia de Bartolomeu de Xove, Lugo, el día 28 de diciembre, mismo día que se inició el proceso de vacunación en nuestro país. Solo diez días más tarde, ella, junto a diez residentes en el centro de día fueron trasladados a Os Gozos de Pereiro de Aguiar, en Ourense.
El motivo del traslado se debe a que en esa localidad la Fundación San Rosendo, encargada de gestionar los dos centros, tiene una planta aislada donde se trasladan a los contagiados por la enfermedad para que se puedan cumplir con todas las medidas de prevención necesarias, claro está con el previo consentimiento de las familias.
Un error de identificación
Dos de las afectadas por el coronavirus viajaban juntas y compartían habitación, lo que produjo un error de identidad en el traslado. Así lo asume la organización en un comunicado remitido a los medios, una de las dos falleció, y su defunción fue notificada a los familiares. A causa del error, los mismos familiares fueron erróneamente avisados, ya que la mujer que había fallecido realmente no era de la que se dio parte.
El entierro se celebró al día siguiente, y debido a los protocolos que establece el Covid, el ataúd ha de permanecer plenamente cerrado, hecho que evitó la identificación. Tras diez días desde el error, la mujer que presuntamente había fallecido dio negativo en la PCR y entonces se encontraba lista para volver a su residencia en Lugo.
Allí la esperaba su marido, quien asumía ya la supuesta pérdida. «Son dos personas con deterioro cognitivo, por eso la mujer tampoco nos sacó del error cuando la llamábamos por otro nombre» menciona personal de la entidad. La institución ha proclamado que se trata de un error puntual y que lamenta profundamente la confusión que se ha generado en torno al malentendido.
A pesar de la problemática han aprovechado para lanzar un mensaje de tranquilidad y confianza en la Fundación. El centro asegura que se han producido más de 100 traslados y que se han efectuado sin ningún tipo de problemática. Además inciden en la importancia de realizar este tipo de gestiones para el porvenir del resto del centro sanitario, y que no haya más personas de las estrictamente necesarias que se puedan ver afectadas.
La otra cara de la moneda
Los familiares de la mujer sobre la que se produjo el malentendido, vivieron momentos de tensión, pero es cierto que la mujer fue identificada y se encontraba con vida. Otra resolución muy diferente es con la que tienen que conformarse los familiares de la mujer que realmente sí había fallecido.
El hermano de la mujer que fue confundida relataba incrédulo como ante un asunto de tal seriedad se podían haber confundido con su hermana. «Me dijeron que estaba curada, viajé para verla y al llegar me enteré de que llevaba muerta diez días» ha mencionado el familiar a 'La Voz de Galicia'.
Sin duda el malentendido deja consecuencias para todos los afectados, y aunque al principio pueda parecer una historia increíble, lo cierto es que siempre hay una parte afectada si el involucrado es el Covid.