Profesionales sanitarios trabajando para luchar contra el coronavirus.

Los 4 síntomas de las personas que han pasado el coronavirus

Las unidades médicas poscovid intentan evaluar si las secuelas serán recuperables o crónicas.

Las consecuencias del coronavirus pueden prolongarse a lo largo de tiempo. Muchas personas que han conseguido superar la enfermedad sufren secuelas incluso meses después de estar contagiado. Las unidades médicas poscovid han detectado cuatro síntomas frecuentes en los pacientes que han cursado la enfermedad.

  «No están al cien por cien. No todos. Pero digamos que un 40% presentan secuelas a pesar de que en algunos casos, desde el alta, hayan transcurrido más de dos meses», explica a Efe Chus Domínguez Santalla, médico internista en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago y especialista en enfermedades infecciosas. 

Los cuatro síntomas poscoronavirus

Lo más llamativo para los expertos es que son problemas que presentan enfermos de distintas edades y grados de complicación. Es decir, son síntomas que se han detectado tanto en personas jóvenes que cursaron la enfermedad de forma moderada o personas mayores que requirieron ingreso en UCI. 

El cansancio extremo, la ausencia de sueño, la alopecia y las ganas de llorar son los cuatro síntomas más frecuentes en este tipo de pacientes. Sin embargo, también hay otros problemas comunes como pueden ser la amiatrofia o debilidad muscular en aquellas personas que permanecieron en cuidados intensivos o la fatiga. 

La doctora ha explicado que un 30% de los pacientes ya curados muestran todavía algún síntoma respiratorio como tos o sensación de falta de aire. A pesar de que las radiografías aparecen normales, las molestias continúan y los expertos tratan de averiguar si se tratarán de dolencias recuperables o si serán crónicas.

Problemas emocionales tras sufrir el coronavirus

Según la doctora, el aspecto emocional es uno de los más difíciles de evaluar y controlar. El estrés y la sensibilidad generada tras cursar la enfermedad pueden ser los causantes de problemas como la falta de sueño, la alopecia o la tendencia al llanto. «Muchos tienen trastornos del sueño y están frágiles emocionalmente.

Y yo tampoco sé qué porcentaje de esto es debido a la situación que hemos vivido todos con el confinamiento, a la que hay que sumarle el estar ingresados en un hospital algunas semanas, solos en una habitación, y con dificultad para comunicarse», señalaba Chus Domínguez. En el caso de la alopecia, sucede lo mismo. La especialista no cree que sea directamente un efecto del SARS-CoV-2 y sí en cambio una consecuencia del estrés al que han estado sometidos los pacientes.