La crisis del Coronavirus está arrasando con todo. Tal y como preveían los economistas, la gran recesión está golpeando sobre todo a las pequeñas y medianas empresas y los autónomos, pero sus efectos están llegando también a grandes corporaciones como Inditex, que ahora acaba de declarar pérdidas por primera vez en su historia.
La firma de Amancio Ortega ha presentado los resultados antes de la apertura de mercados y ha declarado pérdidas de 175 millones de euros debidos a la crisis. Además, las ventas durante el primer trimestre han caído un 44% hasta los 3.303 millones de euros «a pesar de que en el periodo ha llegado a estar cerrado hasta el 88% del parque total de tiendas, debido a la pandemia». Durante este trimestre, las ventas online han crecido un 50% y un 95% en abril.
Inditex no realizó ningún expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) durante la crisis del coronavirus, algo que fue alabado y puesto como ejemplo por miembros del Gobierno como la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la empresa de Arteixo ha podido mantener la caja, de modo que apenas ha notado el virus en este sentido.
Ahora, su posición financiera se sitúa en 5.752 millones de euros frente a los 6.660 millones del año pasado. La empresa explica que esto es consecuencia «del fuerte desempeño operativo a lo largo de los años y del mantenimiento de la cultura y la política financiera».
De hecho, si la multinacional española ha logrado amortiguar el golpe ha sido gracias a una provisión de algo más de 300 millones de euros para ejecutar un plan de impulso a la venta online y una actualización de las tiendas, al mismo tiempo que se han logrado reducir los gastos operativos en un 21% fruto de la activa gestión de Zara.
Además, la crisis no ha impedido que la empresa de Amancio Ortega haya contribuido a ayudar en la emergencia sanitaria con financiación y recursos logísticos concretos, como trasladar desde China hasta Europa más de 120 millones de unidades de equipamiento sanitario.
Un nuevo concepto de empresa para 2022
Inditex ha anunciado que no modificará apenas el precio de sus acciones y, por su lado, su presidente Pablo Isla ha avanzado que destinará un total de 2.700 millones de euros para desarrollar un nuevo plan estratégico para anticipar la transformación digital.
Según Pablo Isla, el plan supone la culminación del proyecto cuyas bases se han ido fijando progresivamente con importantes inversiones desde 2012 y va a transformar significativamente el perfil de la compañía. «El objetivo de aquí a 2022 es adelantar la implantación total de nuestro concepto de tienda integrada, cuyo futuro estará vinculado al servicio permanente al cliente allá donde se encuentre, en cualquier dispositivo, y en todo momento».