Patrick Nogueira, Janaína y Marcos Campos y Janaína Santos

17 de septiembre, la fecha del crimen más atroz que se recuerda en España: 4 víctimas

Hoy se cumplen 5 años del hallazgo de los cuerpos sin vida de unos padres y sus dos hijos pequeños. Se trató de un crimen pasional

Un crimen múltiple sacudió al tranquilo pueblo de Pioz, en Guadalajara, el 17 de septiembre de 2016. Esa noche la Guardia Civil encontró en un chalet los cadáveres de dos niños de uno y cuatro años, junto con sus padres.  

El mal olor que desprendía la casa fue el signo de alerta para un vecino, que avisó a la Guardia Civil. Una vez allí, los agentes se encontraron con la brutal estampa:

Los niños y sus padres, de origen brasileño, habían sido asesinados, descuartizados y guardados en bolsas. 

Se trataba de Marcos Campos Nogueira, Janaína Campos, de origen brasileño, y sus hijos David y Carolina.

En un principio, las hipótesis apuntaban a un posible ajuste de cuentas como móvil del asesinato múltiple. Incluso José Julián Gregorio, delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, llegó a afirmar que todo encajaba con la teoría de un ajuste de cuentas. Aún así, subrayó que a su parecer, “un ajuste de cuentas de esta categoría no es algo común”.
 

Sospechas entre el entorno familiar

Y es que en las investigaciones algo no cuadraba, pues la pareja no tenía antecedentes penales, ni en España ni en Brasil. Al poco tiempo se empezó a pensar que el asesinato podría haberlo cometido alguien del círculo cercano de la familia. Y es que la puerta no había sido forzada.

La investigación siguió avanzando, y se fueron sabiendo más detalles de este macabro crimen. La muerte de la familia se habría producido en el salón de la vivienda entre el 16 y el 22 de agosto, cuando fueron degollados.

Sin embargo, hubo otro hecho que hizo ganar fuerza a la hipótesis de que se trataba de alguien cercano a la familia. Los dos padres habían sido descuartizados, pero no los niños.

El sobrino del padre, el asesino

Todo dio un giro cuando la policía encontró restos biológicos de un sobrino de Marcos Campo, el padre de familia. Su ADN apareció en la cinta americana utilizada para cerrar las bolsas donde estaban los cadáveres. 

El sobrino se llamaba Patrick Nogueira Gouveira, tenía 20 años y estaba obsesionado con la mujer de él, y madre de los niños asesinados. Se trató de un crimen pasional. Además, el sospechoso se había ido de España el 22 de agosto, fecha que coincidía con la del asesinato de la familia.

El asesino mató primero a la mujer, y después a los niños. Luego esperó tranquilamente en su casa a que llegara de trabajar el padre, para acabar con su vida y descuartizarlo.

Lo más macabro de todo es que el asesino fue contando todos los detalles del crimen a su mejor amigo  Marvin Henriques Correia. Lo hizo por WhatsApp, mientras esperaba a que llegara su tío para asesinarlo. En 2018 Patrick Nogueira fue condenado por un jurado popular en España, a tres dondenas de prisión permanente revisable.

Henriques Correia llegó a ser detenido por la Policía brasileña por este atroz crimen, bajo la sospecha de haber colaborado con el autor del cuádruple asesinato.

Sin embargo, luego fue puesto en libertad con medidas cautelares. Tras el juicio en Brasil, quedó absuelto ante la indignación de la familia.

La jueza consideró a aunque el acto en sí era despreciable, no existía en el código penal brasileño la tipificación de ese delito. Se encontraban por lo tanto ante un ''vacío legal''. 

Durante el proceso, se supo que Patrick había dado signos de agotamiento mientras esperaba a que llegara su tío. Se había incluso planteado no matarlo. Pero Henriques Correia le insistió para que siguiera con su plan original de matar a toda la familia.