Las oficinas vuelven a abrir. Los empleados están regresando poco a poco a sus lugares habituales de trabajo.
Una vez superados los meses de confinamiento y las primeras fases de la desescalada toca volver al trabajo. Son muchas las empresas que están reabriendo sus oficinas o adaptándolas para abrir cuando antes. Esta vuelta al trabajo puede vivirse como algo positivo y gratificante. Puede ser el regreso a tras romper la rutina doméstica que tan presente ha estado en los últimos tiempos.
Pero no para todos es motivo de alegría. La sola idea de volver al trabajo puede ocasionar ansiedad y estrés. Recuperar la agenda no siempre implica algo positivo. El miedo y la incertidumbre para afrontar los nuevos protocolos crean un cóctel de emociones que en necesario saber gestionar.
Según la quinta ola del Barómetro Covid-19, elaborado por la empresa Kantar con la opinión de más de 25.000 personas en más de 50 países, a finales de mayo sólo el 26% de españoles estaba dispuesto a volver a la oficina tan pronto como fuera posible.
Por su parte, un 30% preveía que necesitaría entre uno y tres meses para sentirse cómodo al pensar en volver, y un 8% calculaba que requeriría más plazo.
Esta encuentra confirma también que siete de cada diez españoles no se sentirán seguros con la vuelta a la ‘nueva normalidad’ hasta que no se encuentre una vacuna contra el virus.
Para que la ‘nueva normalidad’ se haga más llevadera los psicólogos de la plataforma onnline THerapyChat han propuesto cinco consejos sencillos. Estos pueden ayudar a paliar las consecuencias negativas de la vuelta al trabajo.
Los cinco básicos para la vuelta a la oficina
Lo más importante es no anticiparse. Es importante recordar que no hay que perder el tiempo imaginando cómo será la vuelta. Hay que esperar a que ocurra y seguro que no será tan negativa como en un principio se creía.
Para evitar el estrés y la ansiedad la planificación es una buena aliada y puede liberar de los pensamientos negativos.
Para poder ajustar los pensamientos a la realidad de la situación es fundamental estar informado. No debe confundirse informarse con sobreinformarse. No hay que dejarse llevar por ideas negativas que no estén fundamentadas en una base real.
Además, el reencuentro con los compañeros puede ser una de las principales motivaciones para la vuelta al puesto de trabajo. Las personas con las que se comparte la jornada laboral son importantes en el día a día. Trata de pensar en aquellas a las que echas de menos y con las que pasas buenos momentos.
La desconexión también puede ayudar a motivarte. Con el teletrabajo a muchos les cuesta cumplir los horarios y separar lo personal de lo laboral. Con la vuelta a la oficina las fronteras físicas entre el trabajo y la casa quedan claras.
Finalmente, otro de los consejos de los psicólogos para quienes están angustiados por la vuelta a la rutina es que practiquen ejercicios de relajación. Las actividades gratificantes en los momentos de mayor negatividad ayudan a recuperar la estabilidad emocional y cortar los círculos viciosos negativos.