Si estás leyendo este artículo es porque sospechas que tu pareja te engaña y, en realidad, este es un problema muy común. El porcentaje de infidelidades no deja de crecer y especialmente en las mujeres: según los expertos, una de cada tres mujeres ha sido infiel.
Si sospechas que tu pareja te está poniendo los cuernos, sea hombre y mujer, no hace falta que contrates un detective privado. Basta con seguir este método en 10 pasos.
Cómo saber si tu pareja te está engañando
La monotonía, los problemas de comunicación y el desgaste emocional son algunas de las causas más frecuentes de infidelidad. Puedes descubrir si tu pareja te engaña siguiendo estos diez indicadores que nunca fallan.
1. Cambios en el carácter
Más que cualquier evidencia física, todo suele empezar con un repentino cambio de carácter. Si notas que tu pareja de pronto se ha vuelto especialmente fría, que no se comunica contigo con la misma frecuencia o que se encuentra irritado e inestable, puede ser un primer indicador de que tiene una aventura con alguien. Pero por sí sólo, no deja de ser un mero indicio.
2. Rastros visibles
Por eso tienes que seguir investigando. Las evidencias físicas son una prueba más sólida de que algo raro está pasando. ¿Su ropa de pronto tiene un olor extraño? ¿Llega a casa despeinado o con una marca en la piel? ¿Has encontrado algún objeto extraño en el coche, o en tu dormitorio? La cosa empieza a tener pinta de que tu pareja te engaña.
3. Incoherencias
Claro que una cosa es tener un desliz y la otra ser infiel de forma continuada. En este caso, uno de los indicadores más evidentes es que pone excusas continuamente y que sus historias no tienen coherencia. Cuando no sabe qué responder o mantiene un discurso dubitativo tienes que empezar a sospechar realmente que tu pareja te está engañando.
4. Está a la defensiva
Quizás ha llegado el momento de pasar a la ofensiva y ponerlo contra las cuerdas. Insiste en las preguntas sobre dónde va, y qué hace después del trabajo. Si en un momento dado se pone a la defensiva y contesta con evasivas de forma irritada, tendrás otro indicativo de que posiblemente tu pareja te está siendo infiel.
5. Cambio de rutinas
Lo que hace en el día a día de forma cotidiana es muy importante. Un cambio repentino de sus rutinas indica inequívocamente que algo ha cambiado en su vida, y si no es algo manifiesto o que pueda confesarte, es que algo te está ocultando. ¿Tiene nuevas aficiones y, además, no te ha incluido en ellas? Motivo de sobra para seguir sospechando.
6. Está mucho en las redes sociales
Según los expertos, la mayoría de las infidelidades ya se cometen por redes sociales o a través del teléfono móvil, por ejemplo por Whatsapp. Una de las formas de detectar si tu pareja te está siendo infiel es fijarte si pasa más tiempo que antes chateando por el móvil o en las redes sociales, y si se muestra reticente a la hora de mostrarte las conversaciones.
7. Pasa mucho tiempo solo
Para mantener su secreto a salvo necesita pasar más horas solo de lo habitual. Si notas que se muestra esquivo o que te pide estar solo más tiempo de la habitual (por ejemplo, si prefiere ir solo a los sitios) deberías empezar a preocuparte. Mantener una doble vida requiere tiempo, y normalmente no tenemos tanto para compartirlo, así que se acaba poniendo en evidencia.
8. Demasiado trabajo
El trabajo suele ser una de las excusas favoritas de los infieles. Partiendo de esta base, tienes que fijarte si pasa demasiadas horas en el trabajo y si es realmente creíble. ¿Por qué ahora pasa más de 8 horas en el trabajo y de pronto surgen viajes de trabajo que antes no tenía? Si además empieza a trabajar los fines de semana, saltan todas las alarmas.
9. Su aspecto físico
Un detalle sutil pero que ayuda a completar tu investigación son los repentinos cambios en su aspecto físico. Si de pronto empieza a maquillarse más de lo habitual, a ponerse perfume, a embadurnarse con productos de belleza y a vestirse de forma más elegante, es que está intentando resultar atractivo para alguna persona.
10. Baja la intensidad sexual
Todos los aspectos anteriores por sí solos no significan nada. Todos estamos estresados, o necesitamos soledad de vez en cuando, o cambiamos de humor y de rutinas. Pero todos los elementos puestos uno al lado del otro convierten la sospecha en una confirmación. ¿Necesitas una prueba definitiva? Si ya nunca tienes ganas de hacerlo contigo, se confirma la sospecha.