Ya hace tres días de la muerte de Sara Gómez, la mujer de 39 años que sufrió heridas graves en múltiples órganos durante una lipoescultura en una clínica privada de Cartagena. La madre de dos niños, después de permanecer ingresada en la UCI durante varias semanas, falleció el pasado sábado 1 de enero.
Tras la trágica noticia, la familia no quiere que la pérdida de la joven quede impune. Por ello, presentaron una denuncia en contra del cirujano que la operó, por una posible negligencia. El abogado de los denunciantes, Ignacio Martínez, dijo que Sara había llegado al hospital tras la operación estética con lesiones "más propias del resultado de una reyerta con arma blanca".
A causa de la querella, el presunto acusado de la muerte de Sara Gómez estaba citado a las 10.00 horas de este martes 4 de enero a declarar en los juzgados. Sin embargo, el médico ha decidido no acudir en su juicio por homicidio imprudente. La familia no ha dado crédito al respecto.
El posible motivo de la ausencia
El letrado, Ignacio Martínez, ha confirmado que ni el cirujano ni el abogado que lo defendía, Pablo Martínez, se han personado en los juzgados durante esta misma mañana. El intercesor de la familia ha dado la posible razón por la que el presunto autor de los hechos no se ha presentado.
Tal y como ha expresado el letrado, en sede judicial no consta la diligencia policial que confirma la asistencia del médico. Este documento no ha sido entregado en tiempo y forma, por lo que quizás ese sea el motivo de la ausencia.
La familia de Sara Gómez no dormirá tranquila hasta que salga la verdad
Sara Gómez falleció en el Hospital Santa Lucía de Cartagena tras permanecer prácticamente un mes ingresada en la UCI. Cuando fue hospitalizada el 2 de diciembre, ya presentaba daños en múltiples órganos como los riñones, el hígado, el colon, el intestino o el duodeno.
Después de la muerte de la joven de 39 años, su familia presentó una denuncia en contra del cirujano, acusándolo de homicidio imprudente. Además, para evitar cualquier contratiempo, los seres queridos de la fallecida han solicitado la imposición de medidas cautelares. Entre ellas, destacan la retirada del pasaporte y la suspensión de la actividad laboral del médico.
El padre del hijo menor de Sara Gómez, Ezequiel Nicolás, ha sido nombrado como el portavoz de la familia. Quiere defender sobre todas las cosas la muerte de la joven, diciendo que "quiero que todos los responsables se sienten en el banquillo a declarar". Por otro lado, también ha comentado que no se descarta la extensión de la denuncia a más personas relacionadas con la intervención quirúrgica.
El cirujano no quiere saber nada del asunto
El programa Todo es Verdad fue hasta Cartagena para intentar sacar unas declaraciones del médico que realizó la lipoescultura a Sara. No obstante, el cirujano, en cuanto fue preguntado por el fallecimiento de la joven de 39 años, mostró su versión más reacia, ya que dijo: "no voy a hablar contigo. Me parece ridículo".
Gracias a la información facilitada por La opinión de Murcia, hemos podido saber que el cirujano es presuntamente tiene los estudios universitarios correspondientes. Empezó la carrera en Chile, la continuó en Murcia y acabó en Nápoles. Posteriormente, obtuvo el máster en medicina estética y antienvejecimiento en Madrid, pero carece de los cinco años de especialidad en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética.