Son muchas las teorías que apuntan sobre el origen del Covid-19, teorías que señalan que el virus saltó de los animales al ser humano y otras más conspirativas que apuntan a la mano del hombre como el artífice del virus.
Luc Montagnier, el virólogo francés ganador del Premio Nobel de Medicina en 1983, ha sido de los últimos en pronunciarse y apunta con rotundidad, que el coronavirus fue creado en un laboratorio de China, pero eso sí, de manera accidental.
Ha sido durante una entrevista para el canal francés CNews, donde Montagnier ha lanzado su hipótesis: «Hemos llegado a la conclusión de que este virus fue creado» aseguraba explicando que unos «biólogos moleculares» mezclaron secuencias genéticas del VIH a un coronavirus en un intento de buscar una vacuna contra el sida.
«Ha habido una manipulación del virus: al menos una parte, no la totalidad. Hay un modelo, que es el virus clásico, que proviene principalmente de los murciélagos, pero al que se han agregado secuencias de VIH» explicaba.
El premio Nobel no tiene muy claro la intención de los biólogos, aunque señala que «es el trabajo de profesionales» y sostiene como la hipótesis, que el objetivo del experimento «es que querían crear una vacuna contra el sida».
La teoría de Luc Montagnier se basa en el estudio de un grupo de investigadores del Instituto Indio de Tecnología de Nueva Delhi que encontraron «un parecido extraño» en las secuencias de aminoácidos de una proteína de SARS-CoV-2 y el de VIH-1, una coincidencia que «tiene pocas posibilidades de ser fortuito».
En la entrevista, también predijo la desaparición del virus debido a que su supuesto origen artificial podría terminar por provocar su erradicación: «Si usted hace una construcción artificial, es poco probable que sobreviva. La naturaleza ama las cosas armoniosas; lo que es ajeno, como un virus que llega de otro virus, por ejemplo, no es bien tolerado» opina.
El científico sostiene que las partes del virus donde fue insertado el VIH están mutando, lo que acabará por provocar su autodestrucción.