Mano sosteniendo un móvil

Un científico español muestra el WhatsApp que ha recibido: 'Es preocupante'

Un amigo le revela la conversación que ha escuchado en el autobús entre dos personas, una de ellas asintomática

Hace un año que convivimos con el coronavirus, pero algunas cosas no dejan de sorprender. El investigador español Nacho de Blas ha compartido en Twitter un mensaje que ha recibido de un conocido, que le desvela la conversación de dos personas en autobús. El mensaje ha generado una reacción en cadena de usuarios poniéndose las manos en la cabeza. 

Nacho de Blas es profesor de Patología Animal en la Universidad de Zaragoza, e investigador en Epidemiología Veterinaria. Según cuenta, ha recibido un mensaje de Whatsapp de una persona «muy próxima» que le desvela lo que ha escuchado en el autobús.

Se trata de un autobús de la línea 34, por más señas, y con el detalle de que iba con las ventanillas cerradas. Algo que incumple una de las medidas básicas de prevención de la transmisión del virus, porque impide la correcta ventilación del espacio. Pero esto no fue lo peor, sino lo que una persona del autobús le dijo a la otra.

Ese conocido del científico español cree que los protagonistas de la escena son marido y mujer, y cuenta que él le dice a ella: «No te preocupes, mujer, y como eres asintomática no pasa nada, puedes ir donde quieres». El emisario del mensaje se muestra muy sorprendido con lo que ha escuchado: «Yo flipo».  

El científico no ha dudado en compartir el mensaje en Twitter para demostrar hasta qué punto hay aún personas que no son conscientes del peligro que pueden causar. La escena, que tuvo lugar en Zaragoza, ha causado perplejidad en Nacho de Blas, que adjunta las capturas de pantalla de Whatsapp y lo remata con un: «Yo también flipo».

El problema de los asintomáticos

Esa conversación refleja uno de los principales peligros del coronavirus, ya según un estudio publicado la semana pasada en Estados Unidos, los asintomáticos juegan un papel fundamental en la transmisión del virus. Según las investigaciones que se han realizado, suman más de la mitad de los casos en la tercera ola.

Esta es la gran característica del nuevo coronavirus y lo que le hace diferente, ya que se transmite sobre todo a través de personas que no manifiestan síntomas y no saben que están enfermos. Por eso la clave de la lucha contra la pandemia está en hacer más test y rastreo de contactos, y ahora hay muchos más asintomáticos que saben que son portadores del Covid-19 que en la primera ola, ya que ahora se hacen más pruebas.

De ahí la gravedad de esa conversación, que muestra a una persona que sabiendo que tiene coronavirus piensa que no lo puede transmitir a los demás y sigue exponiendo al resto al contagio. Según el informe en cuestión, aproximadamente el 59% de todos los contagios se producen por transmisión asintomática, un 35% por presintomáticos, y un 24% de pacientes que nunca desarrollan síntomas.

Los científicos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos han mostrado que los asintomáticos transmiten el virus, aunque no son tan contagiosos. Se calcula que transmiten el virus un 25% menos, pero son los responsables de más de la mitad de los nuevos casos positivos.

Indignación por el comentario

La regla de oro es que una persona que da positivo por coronavirus debe permanecer aislada con independencia de si tiene síntomas o no. De lo contrario, estará poniendo en riesgo al resto de la población y su actitud puede tener consecuencias fatales.

España se encuentra en pleno ascenso de la curva de la tercera ola, un repunte muy acusado de los contagios que va camino de batir todos los récords y que está llevando ya a una gran presión hospitalaria en muchos lugares. Además, la nueva cepa más contagiosa del coronavirus ya circula en al menos 12 comunidades autónomas y lo complica todo aún más.

Si las restricciones actuales no funcionan y la variante británica se sigue extendiendo, los expertos temen que en pocas semanas los contagios se multiplicarán de forma exponencial llegando a un escenario parecido al de la primera oleada, en marzo de 2020. Por eso los usuarios de Twitter se han llevado las manos a la cabeza con el mensaje.