Castilla y León ha decidido este viernes ignorar al Ministerio de Sanidad y mantener el toque de queda avanzado que ha anunciado este 15 de enero, y que a partir de mañana, 16 de enero, entrará en vigor a partir de las 20:00 horas.
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha firmado el acuerdo al que ha llegado el gobierno regional con las distintas diputaciones provinciales y los principales alcaldes de la región, y que será publicado mañana en el Boletín Oficial de Castilla y León.
La Junta ha remitido un comunicado en el que anuncia que Mañueco, autoridad delegada competente en la legislación para la contención de la pandemia en la comunidad autónoma, sigue adelante con todas las restricciones acordadas hoy a pesar de que el Ministerio de Sanidad ha rechazado el avance del toque de queda, al considerar que «no tiene cabida» dentro del texto del estado de alarma que está vigente actualmente en España.
Hay que recordar que, según Sanidad, el horario del toque de queda quedó fijado entre las 23:00 horas y las 06:00 horas, aunque las autonomías tenían permiso para modificarlo en una hora, empezando como muy pronto a las 22:00 horas y acabando como tarde a las 07:00 horas.
Los servicios jurídicos de la Junta de Castilla y León, sin embargo, entienden que el artículo 10 del Real Decreto 956/2020 del 3 de noviembre, autoriza a las autoridades delegadas competentes, en este caso el presidente, Fernández Mañueco, a «modular, flexibilizar y suspender» la limitación de la libertad de circulación de las personas durante el horario nocturno.
El informe recoge que «modular es modificar los factores que intervienen en un proceso para obtener distintos resultados», por lo que entienden que Mañueco tiene autoridad para modificar los criterios que se aplican al toque de queda durante el horario nocturno, que también entienden que va «del ocaso al amanecer», por lo que las 20:00 horas entrarían dentro de esa franja en esta época del año.
Castilla y León había anunciado esta mañana las distintas restricciones, y su presidente comunicó a Salvador Illa durante esta mañana su decisión de cambiar el toque de queda en la región, la primera que impone un confinamiento nocturno desde tan pronto. Aun así, el ministro rechazó la medida alegando que el texto del estado de alarma no contempla una modificación de este calibre.
Restricciones en Castilla y León
Así, si finalmente mañana se publican en el Boletín Oficial de Castilla y León, desde las 20:00 horas del sábado, 16 de enero, estas serán las restricciones en toda Castilla y León:
- Cierre perimetral de toda la autonomía y cierres perimetrales de sus nueve provincias durante un tiempo ilimitado mientras dure el estado de alarma
- Limitación de la movilidad nocturna y toque de queda entre las 20:00 horas y las 06:00 horas
- Limitación de número de personas en las reuniones sociales, sean en espacios públicos o privados, a un máximo de 4 personas salvo que sean convivientes. Esta medida no se aplicará a instalaciones y establecimientos abiertos al público con una normativa especifica, ni tampoco a las reuniones laborales e institucionales.
- Reducción de aforo para las celebraciones y encuentros religiosos a un máximo de 25 personas, siempre que no se supere un tercio del aforo total.
Estas medidas, como viene siendo habitual, se revisarán en los próximos 15 días para decidir si deben mantenerse, modificarse o eliminarse, en función de la evolución de la pandemia.
Además, las medidas que se aplicaban hasta ahora seguirán vigentes, por lo que los centros comerciales, gimnasios e instalaciones deportivas en espacios cerrados y el interior de los bares seguirán clausurados.