Fallece Carolina Siles, la primera ujier con Síndrome de Down de Les Corts

Adiós a Carol, la ujier con síndrome de Down que nos dio una lección de vida

Se ha marchado dejando una huella imborrable en el corazón de todos. «Me encanta mi trabajo», decía.

Con tan solo 50 años, Carolina Siles Morales ha fallecido. Una noticia que ha causado gran conmoción al ser muy conocida en Les Corts Valencianes, en donde ejercía como ujier en el Parlamento. La conocían más comúnmente como Cárol, y tanto ella como Ovidi Montón Izquierdo, siempre han sido dos empleados ejemplares y muy valorados por todos, dos espejos en los que mirarse para las personas que sufrían Síndrome de Down.

Cárol era una chica discreta, una empleada muy trabajadora y eficaz en la biblioteca de la Cámara valenciana en donde acudía diariamente para desarrollar sus labores. A todo el que se le pregunta coincide en que Cárol, durante los 25 años que ocupó ese puesto de trabajo, lo hizo de manera impecable, con ilusión y nunca nadie tuvo nada que reprocharle.

Era muy habitual verla transitando por los pasillos del Parlamento acompañada de su carrito, trasladando libros y atendiendo con una sonrisa a cualquier petición de empleados y diputados. Todo el que la conocía la califica como una eterna enamorada del cine y de la música. «Mi labor es coger la prensa y cuñarla, al igual que los libros. También llevo el portafirmas al letrado mayor y a la presidenta», contaba Cárol hace unos años, en 2009 en un reportaje de ‘LAS PROVINCIAS’. No solo lo decía, sino que siempre demostraba que le encantaba su trabajo.

Todas las mañanas acudía a trabajar a Les Corts, y en las tardes aprovechaba para exprimir sus hobbies favoritos como dedicar tiempo a practicar actividades dirigidas al teatro, otra de sus pasiones, o también ir a clase de informática. «Mis compañeros son muy buenas personas y me tratan muy bien. Este trabajo me da seguridad», transmitía en aquel reportaje con el fin de dar visibilidad a las personas con Síndrome de Down y mostrar así que todos somos capaces de todos y que, en su caso, tenía la capacidad necesaria para ejercer este tipo de trabajos.

Cárol dejó de asistir a los pasillos de Les Corts porque se tuvo que jubilar con motivo de su enfermedad.

Un nuevo ángel que gana el cielo y que, por su parte, deja un vacío en la Cámara y en el corazón de muchos diputados y empleados de Les Corts Valencianes, donde dejó una huella imborrable.

21 de marzo, Día Mundial del Síndrome de Down

Estas personas con síndrome de Down, tristemente se encuentran cada día con numerosos obstáculos y barreras. Es esencial visibilizar sus logros y las capacidades que presenta este colectivo para poder erradicar por fin estos estigmas, y para que se conozca, y se pueda afirmar que estas personas con el apoyo necesario, son válidas, capaces y pueden conseguir absolutamente todo lo que se propongan.

De la misma forma, es básico fomentar el empleo para estas personas con síndrome de Down en empresas ordinarias. En estos días, muchas veces parece un tabú el hecho de ver a un camarero, deportistas por televisión, cocineros, etc., por ejemplo, con esta discapacidad. Así mismo, para la propia entidad sería clave contar con estos ejemplos, ya que supondrían una herramienta muy importante para la inclusión real.

Por ello, la sociedad debe permanecer en contacto directo con estas personas con discapacidad intelectual, aportar nuestro granito de arena a la causa.

Normalizar esa visión equivocada para muchos para convertirla en algo puramente positivo. Que verles en todo tipo de ámbitos es fundamental para que la ciudadanía ayude a cumplir sus derechos y obligaciones, los respete y valoren como personas, como un ciudadano más, y los trate de tú a tú. Únicamente de esta forma, en un futuro próximo, se pondrá hablar de la inclusión real.