Carmen sigue en prisión provisional tras el brutal hallazgo que tuvo lugar en 2019 en Castro Urdiales, Cantabria. La mujer de 61 años acabó, presuntamente, con la vida de su pareja Jesús María, un bilbaíno de 67 con el que convivía.
El hombre llevaba meses desaparecido y sin dar señales de vida. En septiembre de ese mismo año, una vecina decidió llamar a la policía. Semanas antes, Carmen le entregó una caja para que se la guardara y con el tiempo comenzó a salir un hedor de ella.
Alertada por lo que hubiera dentro, abrió la caja y vio dentro la cabeza de José María. Carmen fue detenida y desde entonces permanece en la cárcel.
Carmen metió en una caja la cabeza de su novio
Todo ocurrió en 2019 en la localidad cántabra de Castro Urdiales. José María, un hombre responsable y empleado de banca, se separó de su mujer. Fue entonces cuando conoció a Carmen, con la que comenzó una relación sentimental.
El hombre tenía como afición acudir todos los lunes a una partida de cartas con sus amigos. Sin embargo, desde mediados de febrero, José María dejó de ir y las alarmas comenzaron a saltar. No cogía el teléfono y tampoco acudía a las reuniones ni cenas.
Preocupados por él, se pusieron en contacto con Carmen quien les dijo que estaba de viaje por Galicia y que el móvil se le había roto. Una explicación que no llegó a convencer a su entorno provocando que su hermano interpusiera una denuncia por desaparición.
Consciente de que la Guardia Civil acudiría al domicilio, Carmen le pidió a una vecina que le guardara una caja. Según ella, contenía juegos eróticos de José María y no quería que saliera a la luz los gustos de su novio.
Con el paso de los días, la caja comenzó a oler muy mal por lo que la mujer decidió abrirla y desenvolver el papel de regalo. Allí encontró un cráneo humano que parecía ser el de José María.
Inmediatamente dio aviso a la policía que se personó en el domicilio. Las primeras investigaciones señalaron a Carmen como artífice del crimen. Al parecer, se vio acorralada y decidió deshacerse de la cabeza tras cocerla y envolverla en papel de regalo.
El Ministerio Fiscal solicita 25 años de prisión
La actitud de Carmen fue la que provocó que las sospechas la señalaran directamente a ella. Sus diferentes versiones sobre el paradero de José María no se sostenían. En un principio aseguró que estaba de viaje, y después que la había abandonado y que se había llevado todo el dinero.
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Pero los últimos movimientos bancarios fueron solo los de la presunta asesina que había retirado algunas cantidades. Lo que hizo pensar que Carmen actuó "movida por un interés económico", ideando un plan para acabar con la vida de José María.
La mujer fue detenida al día siguiente de descubrir la cabeza de su novio. La Fiscalía considera a Carmen como autora de un delito de asesinato con alevosía con imposibilidad de defensa y agravante mixto de parentesco.
Al parecer, usó fármacos sedantes para perpetrar el crimen dentro del domicilio sin ayuda de terceras personas. Un crimen planeado e intencionado por el que se le pide 25 años de prisión. También una indemnización a los dos hijos de la víctima, a su hermano y a su primo.
Quien conoce a Carmen la describe como una persona "rara y de gruñona". La localidad sigue consternada por lo ocurrido y todavía queda un asunto pendiente de resolver. La cabeza de José María apareció, pero no así el resto del cuerpo, una cuestión a la que solo Carmen puede dar respuesta.