Carlos Salvador Hernández, operador de grúa de 49 años, ha fallecido en un fatal accidente en Roces (Gijón). Murió ayer por la mañana al caerle encima una plancha de gran tamaño cuando realizaba unas obras en el poblado. Carlos estaba casado y era padre de una niña de doce años.
Este vecino de Nuevo Gijón llevaba mucho tiempo trabajando en la construcción. Ayer estaba realizando labores de encofrado en la construcción de un bloque de viviendas. Llevaba dos años en la misma empresa y todos le consideraban algo más que un compañero, un buen amigo.
Ayer por la mañana los servicios de emergencia recibieron el aviso de una persona herida en un bloque de nueva construcción. Concretamente entre las calles María de las Alas Pumariño y Matilde de la Torre. Ahí empezaron los intentos a la desesperada para salvarle la vida, pero no pudo ser.
Todo sucedió muy rápido
Eran las diez de la mañana cuando los compañeros de Carlos Salvador dejaron un momento su trabajo para ir a picar algo. Cuando volvieron se encontraron a su amigo herido en una imagen que no se les va a quitar nunca de la cabeza. Le había caído encima una plancha de grandes dimensiones.
La Policía Nacional e Inspección de Trabajo hicieron acto de presencia para abrir una investigación. Tratan de dilucidar si se trató de un accidente fortuito o pudo haber algún tipo de negligencia punible. Se trata del quinto accidente laboral grave en la comunidad en lo que va de año.
Los compañeros quedaron muy afectados por la muerte de su amigo y la forma en la que ocurrió todo. La empresa transmite que Carlos era un buen trabajador y que llevaba dos años con ellos, pero declinan hablar sobre el accidente. “No sabemos qué pudo pasar”, se limitan a comentar.
Nadie vio nada
“Nadie lo vio, ahora lo están investigando pero lamentablemente a veces pasan cosas, un fallo o un despiste”, dice la empresa. Desde el principio colaboraron con la policía en todo lo que pidieron y entregaron la documentación requerida. El caso está ahora en manos de la autoridad competente.
Tuvieron que intervenir los Bomberos para retirar la placa que le había caído encima al operario. Los sanitarios no pudieron hacer nada, porque había muerto casi en el acto. A pocos metros de donde estaban trabajando los servicios de emergencia aguardaban en grupo los compañeros del fallecido.
Estaban desolados, mientras la policía científica tomaba fotos y muestras del lugar del accidente. Sobre las 12:20 horas llegaron responsables de Inspección de Trabajo, que pidieron toda la documentación a la empresa. Junto con la policía iniciaron una investigación para esclarecer lo ocurrido.
Hoy será despedido por sus seres queridos
La autoridad judicial autorizó el levantamiento del cadáver para su traslado al Instituto Anatómico Forense. Allí se realizará la autopsia que también formará parte de la investigación. La muerte de Carlos Salvador ha causado una profunda conmoción, ya que era alguien muy querido.
Su vida fue una historia de superación, ya que de pequeño fue usuario del Hogar de San José para niños vulnerables. En 2008 se casó con el amor de su vida, Natalia Ríos Campos, y tuvieron una niña de nombre Paula. Ahora esperan el cuerpo de su ser querido para despedirse de él.
Ayer por la tarde, al conocerse la tragedia, empezaron a llegar los primeros mensajes de cariño y apoyo a la familia. Recordaron a Carlos como una gran persona, alguien que no merecía acabar sus días a una edad tan joven. Tras la autopsia, sus restos serán velados en el tanatorio de Gijón.