Rusia ya da por hecha la conquista de Mariúpol. Esta ciudad portuaria ha sido víctima de un grave asedio durante las últimas semanas por parte de las tropas de Putin. Desde Europa advierten de los múltiples crímenes de guerra que están cometiendo en Ucrania y lo califican de 'genocidio'.
En unas imágenes de satélite publicadas por Maxar Tecnhologies, revelan la existencia de unas 200 fosas comunes en Manhush, una población cercana a Mariúpol. El alcalde de Mariúpol, Vadym Boychenko, ha acusado al ejército de ruso de enterrar unos 9.000 cuerpos de civiles ucranianos para ocultar sus crímenes militares. El ayuntamiento de la ciudad ha hecho públicos estos datos a través de la aplicación de mensajería instantánea Telegram.
Unas imágenes que podrían revelar que las tumbas fueron excavadas a finales de marzo y ampliadas recientemente, según ha declarado Maxar en un comunicado.
Además, el alcalde se ha referido a la masacre en Ucrania como "el nuevo Babi Yar". Una referencia directa a la que tuvo lugar en 1941, cuando aproximadamente 41.000 judíos ucranianos fueron asesinados por los nazis. "Los cuerpos de los muertos se traían en camiones y, de hecho, simplemente se arrojaban en montículos", añadía Piotr Andryushchenko, un asistente del alcalde Boychenko, comparando ambos exterminios.
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Ucrania no quiere entregar Mariúpol
"La ciudad, era, es y sigue siendo ucraniana", declara Boychenko. El alcalde de la ciudad portuaria niega que Mariúpol haya caído en manos rusas. "Hoy nuestros valientes guerreros, nuestros héroes, están defendiendo nuestra ciudad".
Y es que a pesar de la matanza cometida y de los letales bombardeos, Moscú estima que unos 2.000 soldados, y también aproximadamente unos 1.000 civiles, siguen resistiendo en la planta siderúrgica, a pesar de los continuos ataques rusos. La estrategia de Vladímir Putin pasa por mantener el asedio a la ciudad y esperar a que la falta de comida y munición terminen por vencerlos.
Sin embargo, Rusia parece haberse hecho con el control del resto de la ciudad, incluso con el puerto, pese a su grave deterioro. De hecho, esta sería la mayor victoria para el Kremlin hasta ahora desde el inicio del conflicto en Ucrania. Putin ganaría un puente terrestre para comunicarse con la Península de Crimea, tomada por las fuerzas rusas en 2014.
Putin confirmó la toma de Mariúpol, en una aparición junto al ministro de Defensa Sergei Shoigu. "La finalización del trabajo de combate para liberar a Mariúpol es un éxito", declaró. Por su parte, el Ministro afirmó que la planta de acero podría ser conquistada en pocos días. No obstante, "no hay necesidad de subir a estas catacumbas y arrastrarse bajo tierra a través de estas instalaciones industriales", explicó el presidente ruso. Aunque sí instó al bloqueo de la zona industrial "para que no pase ni una mosca".
Esta captura de la ciudad de Mariúpol le sirve al ejército ruso para liberar fuerzas y unirse a su batalla más importante: la conquista del Donbás, el corazón industrial del este del país.
A pesar de todo, Rusia sigue negando las atrocidades cometidas en Ucrania. Tras descubrirse las fosas comunes en Bucha y en otras ciudades cercanas a Kiev, los funcionarios rusos alegaron que fue la misma Ucrania quien había organizado los crímenes.