Parte lateral de un coche de la Policía Nacional

Avisan de la estafa 'siembra', que ya ha robado a varias personas en España

La Policía Nacional advierte sobre la forma de actuar de los ladrones en los cajeros automáticos

Primer plano de un hombre sacando dinero de un cajero automático
El timo siembra tiene como objetivo el robo en cajeros | GTRES

Una persona mayor en un cajero automático es el blanco más fácil para los atracadores. Se han dado decenas de casos de ladrones que han esperado a que sus víctimas saquen dinero para luego sustraérselo de la manera más cruel que se pueda imaginar. Sin embargo, en ocasiones los 'amantes de lo ajeno' se hacen valer de otras técnicas, digamos más propias de un buen samaritano, para conseguir el mismo fin: robar.

La Policía Nacional lleva tiempo tras la pista de varios grupos de atracadores que se hacen valer de un conocido timo para poder robar el dinero de sus víctimas e incluso su clave PIN para seguir sacando todos los ahorros que puedan. Es el conocido timo 'siembra'. Una estafa cuyo objetivo son las personas mayores.

Así funciona el método siembra

El objetivo de estas líneas es dar a conocer la forma en la que operan este tipo de atracadores para que seamos conscientes de su forma de actuar. De esta manera, tanto si somos víctimas como meros espectadores, podremos evitar que los ladrones se salgan con la suya si sentimos que estamos ante un escenario parecido al descrito.

El método utilizado por este tipo de personas requiere de dos individuos, suficientes para que el robo sea efectivo y acaben haciéndose con el dinero de la víctima e incluso con su clave personal. En el momento en que la persona se encuentra a punto de coger el dinero que sale del cajero, uno de los estafadores tira un billete al suelo y le señala a la víctima que se le ha caído.

Justo en el instante en que se agacha a recogerlo, el otro individuo coge el dinero que ha salido de la ranura del cajero y sale corriendo seguido por su compañero. Como en la mayoría de las estafas y robos, la distracción es el arma que utilizan este tipo de individuos para entretener a sus víctimas mientras perpetúan el robo.

También se puede dar el caso de que uno de los estafadores se sitúe de manera estratégica cerca de la persona estafada a una distancia en la que pueda ver el número PIN de la tarjeta. De esta manera, cuando la víctima está agachada para coger el billete que le han tirado, le sustraen la tarjeta. Así se hacen con el control de la cuenta corriente de la persona engañada.

La actuación de la policía

Los agentes de seguridad ya han detenido a dos personas que actuaban bajo el timo siembra. Tras las primeras averiguaciones se han percatado de que han perpetrado al menos 50 robos bajo este método. Se trataba de una banda criminal cuyo ámbito de actuación se extendía por todo el territorio español hasta países de la Unión Europea llegando a EE.UU.

Fue gracias a la denuncia de una de las víctimas a la que le robaron 6.000 euros lo que ha permitido la creación de un operativo policial para dar con los autores de estos delitos. Estos se hacían valer de identidades falsas con las que moverse con libertad y una vez que conseguían una determinada cantidad, la enviaban a su país de origen. La actuación policial consiguió arrestar a los miembros de la banda gracias a la identificación llegando a conocer que tenían antecedentes penales en países de la Unión Europea y en Norteamérica.

Cómo evitar ser víctima de robo en un cajero

Desde la Policía Nacional lanzan una serie de consejos para evitar que seamos víctimas de los ladrones mientras nos encontramos sacando dinero. Aconsejan mirar a nuestro alrededor para asegurarnos de que no tenemos a nadie lo suficientemente cerca de nosotros para que nos suponga un riesgo y evitar que seamos observados.

A la hora de introducir el número secreto, es conveniente taparlo con una mano para que nadie pueda saber la clave. Y por último —y muy importante— no hacer caso a nadie mientras nos encontramos haciendo gestiones en el cajero automático, pues puede tratarse de una distracción cuyo objetivo nos puede dar un tremendo disgusto.