La muerte de Esther López sigue rodeada de muchas incógnitas por resolver. La joven de 35 años fue hallada sin vida el sábado 5 de febrero y, desde entonces, aún no se ha descartado ninguna hipótesis sobre la causa de su muerte.
El cuerpo sin vida de la joven fue hallado en la cuneta de una carretera, después de 25 días de intensa búsqueda. La investigación para esclarecer las circunstancias de su fallecimiento sigue su curso y es que todavía hay muchos interrogantes en el caso.
La autopsia preliminar de Esther López revela datos determinantes
El cuerpo sin vida de Esther López fue encontrado por un viandante, a pocos metros de donde se le había perdido la pista. La zona donde se encontró el cadáver de la joven era transitada y tenía buena visibilidad, algo que chocó a los investigadores.
Y es que la localización había sido inspeccionada tanto por los agentes, como por decenas de personas que habían participado en distintas batidas para encontrar a Esther López. Así pues, una de las hipótesis que empezó a ganar fuerza por estas premisas fue que el cuerpo hubiera sido movido.
Sin embargo, el cuerpo yacía bocabajo y sin aparentes signos de violencia.
La tesis de que Esther López fuera atropellada ha ido ganando fuerza. El informe preliminar refleja que la joven tenía la cadera rota y también un latigazo cervical, características que podrían encajar con un atropello.
En este sentido, la investigación se está centrando ahora en encontrar al autor del presunto atropello. La Guardia Civil estaría buscando un vehículo todoterreno de color azul que fuera compatible con un golpe en la zona del tórax como el que presenta el cadáver de Esther López.
Después de que la autopsia haya determinado que muy probablemente la joven muriera a causa de un atropello, algunas autoridades se han pronunciado. Este es el caso del director general de Tráfico (DGT), Pere Navarro, quien ha señalado que es “horrible” que Esther López haya podido morir por no ser auxiliada en carretera.
La investigación da un nuevo giro
A pesar de que el atropello es la hipótesis que más fuerza ha ido ganando, no se ha descartado ninguna línea de investigación todavía. Al parecer, la postura del cuerpo de Esther López y su orientación con respecto a la vía no acaban de encajar con un posible atropello o el golpe de un vehículo.
Y es que según publica OkDiario, fuentes de la Guardia Civil han señalado hoy que “se está muy cerca de resolver el caso y con detenciones”. A pesar de ello, aún no se tiene constancia de si en esas detenciones se encuentra alguno de los sospechosos como Ramón ‘El Manitas’ u Óscar.
Ramón ‘El Manitas’ fue el primer sospechoso del caso. La Guardia Civil inspeccionó su chalé situado en la zona de Cañada Real y lo pilló en aparente actitud de huida, ya que estaba preparando sus pertenencias. La detención de Ramón hizo saltar todas las alarmas en Traspinedo, ya que cuenta con un pasado delictivo por varios episodios violentos.
Sin embargo, los investigadores no encontraron ningún indicio que lo incriminara y quedó en libertad a los pocos días de su detención.
El principal sospechoso de la muerte de Esther López es Óscar, uno de los últimos amigos que de la joven que la vio con vida. Óscar ha estado desde un principio en el punto de mira de los investigadores, ya que ha caído en diversas contradicciones en sus declaraciones a los agentes.
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Óscar viajó con ella en el mismo coche la noche de su desaparición y en una primera declaración señaló que Esther se bajó del coche tras una discusión. Sin embargo, todo apunta a que no fue así cómo transcurrió la noche. Al parecer Esther, Óscar y otro amigo habían estado en Las Bodegas, una zona situada a un kilómetro de Traspinedo, consumiendo drogas duras.
El caso está bajo secreto de sumario, así que en los próximos días la investigación podría arrojar luz en todas las incógnitas sobre la muerte de la joven.