Esta tarde, los familiares allegados de la pequeña Noa le darán el último adiós en la capilla del tanatorio de Vigo. La autoridad judicial ha autorizado el enterramiento de la niña después de haberse realizado la autopsia. El juzgado ya conoce los resultados preliminares del examen forense.
Noa, una niña de 4 años, murió el lunes por la tarde mientras jugaba con otros niños en el patio de su casa. La pequeña se golpeó la cabeza con una estructura de hierro, y el impacto le provocó lesiones graves irreversibles. A pesar de los esfuerzos de los sanitarios, acabó muriendo allí mismo.
La policía abrió una investigación para esclarecer las circunstancias del suceso que acabó con la vida de la niña. Todo apuntaba a un accidente fortuito, aunque las autoridades esperaban los resultados de la autopsia para salir de dudas. Las conclusiones del examen forense son claras.
La pieza, un molde metálico
La autopsia practicada por los forenses del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) confirma la principal hipótesis. Indica que se trata de una muerte accidental por el impacto con una pieza de obra que estaba apoyada en la pared. La pieza es un molde metálico de gran peso y tamaño.
Según avanza El Faro de Vigo, este molde metálico se utiliza para realizar los huecos en la pared para las ventanas. Esto coincide con la información aportada inicialmente. Y es que al parecer, en el lugar había varios materiales de construcción ya que se estaban haciendo reformas en el edificio.
La autopsia confirma que la niña murió de un golpe en la cabeza, compatible con el objeto descrito. Además, no hay ninguna otra evidencia que sugiera otras causas de la muerte más allá de la accidental. En base a estas apreciaciones, el juzgado de instrucción decide no seguir con las pesquisas.
Así ocurrió la desgracia
Lo que se sabe del accidente es que Noa estaba jugando con otros niños en la finca familiar en la localidad de Bembrive (Vigo). La niña manejaba un camión de juguete por un montón de arena cerca de la pared donde estaba apoyado el molde metálico. La estructura cedió y golpeó fuertemente la cabeza de la menor.
Eran las 17:45 horas del lunes cuando el 112 recibió la llamada de un particular advirtiendo del accidente. Una niña de corta edad estaba malherida, se había dado un golpe en la cabeza y sangraba de forma abundante. La menor sufría un traumatismo craneoencefálico que la llevó a una parada cardiorrespiratoria.
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Los efectivos médicos trataron de reanimar a la niña allí mismo pero no hubo nada que hacer. Tuvo que intervenir el Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes y Emergencias para atender a la familia. La tragedia causó un gran pesar en el pueblo, donde la familia es muy conocida.
Caso archivado: fue un accidente
Los forenses del Imelga realizaron ayer la autopsia de la niña en la sala del Hospital Nicolás Peña. Analizaron las lesiones que presentaba la víctima, y que eran compatibles con el impacto fortuito de una pieza de hierro. Ante estas evidencias, el juzgado decide archivar el asunto.
La autopsia y los informes policiales confirman que la niña murió de forma accidental, al golpearse con la estructura. Una de las hipótesis es que esta pieza estaba apoyada en la pared con un ángulo muy vertical, y se desplomó por inercia. También podría ser por una racha de viento o un paso en falso, pero parece menos probable.
La familia de la pequeña Noa estuvo durante la mañana en el Juzgado de Instrucción número 8 de Vigo. Están viviendo momentos de mucho dolor, pero al menos ahora ya conocen con más seguridad lo que ocurrió. La Policía Nacional entregó el atestado, que también apunta a un accidente doméstico.
Los padres de Noa, Marcos y Ángel, han pedido de forma expresa poder despedir a su hija en la más estricta intimidad. La niña será despedida por sus padres y su hermano en el tanatorio, y después será incinerada. Así finaliza este dramático suceso que ha dejado consternados a todos los vecinos.