Primer gran revés judicial al Gobierno y al Ministerio de Sanidad por sus medidas obligatorias y forzadas para todas las comunidades. La semana pasada se aprobaron una serie de medidas mínimas para todo el país, pero algunas regiones no quedaron contentas y prometieron recurrir.
Madrid ha sido la primera en hacerlo porque era una de las que se veían obligadas a cerrar el interior de la hostelería. Y ahora la Audiencia Nacional les ha dado la razón y ha suspendido las medidas de forma cautelar.
ElGobierno regional recurrió al considerar «arbitrarias» las medidas mínimas impuestas por Sanidad. También creen que «atenta contra el sentido común y el interés de los madrileños», según palabras de la misma Ayuso.
El ejecutivo madrileño cree que las medidas «causan un daño inmediato, irreparable e insubsanable», especialmente en los sectores afectados. Concretamente, Madrid estaba obligada a cerrar el interior de los bares y el ocio nocturno.
Los jueces quieren evitar un «escenario de incertidumbre»
Los magistrados de la Audiencia Nacional han acordado suspender las medidas de forma cautelar al considerar la situación de especial incertidumbre. Creen que esperarse varios días podría suponer un «escenario de incertidumbre agravado y perjudicado». Especialmente si finalmente se adoptan nuevos cambios de restricciones.
La Audiencia Nacional cree que los profesionales y los ciudadanos se enfrentan a un escenario de «total incertidumbre». Además, si sigue la situación así, se enfrentan a una «inseguridad jurídica evidente». Podría haber tres escenarios de restricciones distintas en pocos días que serían «difícilmente justificables para el ciudadano».
Por esa razón, los magistrados han acordado la suspensión de las medidas y mantener las de la Comunidad de Madrid. Por lo menos hasta que se decida de forma definitiva sobre las restricciones del ministerio.
Ahora, el Estado tiene un plazo de tres días para «efectuar las alegaciones que estime oportunas». Lo llamativo es que al ser la Comunidad de Madrid quien recurrió, la suspensión solo afecta a esta comunidad. El resto de autonomías, salvo que también recurran, sí deberán seguir aplicándolas.
Madrid se niega al cierre del interior de los bares
Entre las medidas aprobadas se encuentran el cierre del interior de los bares en nivel 2 de alerta o el del ocio nocturno. Los horarios comunes en toda España también obligan a los bares a cerrar a la una y a las discotecas a cerrar a las dos.
Si el riesgo es de nivel 1, el ocio nocturno puede abrir hasta las 03:00 horas y los aforos pueden subir hasta el 60%. Aunque en este caso se deberá garantizar una buena ventilación del local.
En el interior de los bares, si está abierto, solo podrá haber aforos al 50% y seis personas por mesa. En el exterior y en las terrazas, al 100%, pero con diez personas por mesa como máximo.
Madrid considera especialmente agravante el tener que cerrar el interior de los bares con más de 150 de incidencia. Particularmente, porque hasta ahora nunca se han cerrado a pesar de haber tenido incidencias mucho más altas.
La Comunidad cree que sus propias medidas han funcionado para controlar la pandemia y no quieren medidas impuestas. Y menos ahora, después de casi un año y medio de Covid-19 y con la vacunación tan avanzada.
Cabe recordar que Madrid es la única comunidad que no ha cerrado la hostelería en toda la pandemia, salvo en el primer estado de alarma. Desde entonces, la mayoría de autonomías la han cerrado, tanto en la segunda como en la segunda ola.
Pero la Comunidad de Madrid optó por los cierres de movilidad, manteniendo casi todos los sectores económicos activos, aunque con medidas sanitarias. Y la realidad, en ocasiones, les ha acabado dando la razón, porque Madrid ha conseguido controlar la incidencia mejor que otras zonas.
Extremadura, la Comunidad Valenciana, las dos Castillas o Murcia han visto dispararse su incidencia hasta los 1.300 casos. En cambio, Madrid no ha llegado a pasar oficialmente de los 1.000 casos.
También es cierto que el descenso en el resto de autonomías ha sido más fuerte, mientras que el descenso en Madrid es mucho más lento. Actualmente, Madrid tiene una incidencia de 142 casos, la cuarta más alta del país.