Imagen de archivo adolescentes en su graduación

Definitivo: Así va a acabar el curso escolar en España

Las medidas tomadas por el Ministerio de Educación y los consejeros ya han sido publicadas en el BOE

Imagen de archivo adolescentes en su graduación
El BOE establece cómo debe acabar el curso 2019-2020 | Pixabay

El BOE ha hecho oficial las instrucciones de cómo debe acabar el curso 2019-2020 en la orden EFP/365/2020 del pasado 22 de abril. Lo que en él se puede leer no se aprecian muchas diferencias respecto a lo que se acordó en la reunión que la ministra de Educación, Isabel Celaá, tuvo con los consejeros el pasado 15 de abril.

Solo la Comunidad de Madrid  ha establecido la limitación para terminar las etapas: dos asignaturas suspensas como máximo en 4.º de ESO (que no sean Matemáticas y Lengua a la vez) y con ninguna en bachillerato.

La finalización del curso está marcada por una serie de directrices como por ejemplo, que  todos los responsables en tareas educativas deban tener un especial cuidado en ayudar a los estudiantes y a sus familias cumpliendo los derechos incluidos en la Convención de los Derechos de la Infancia de la ONU.

Como ya se estableció a mediados de abril, el curso finalizará en junio y las comunidades autónomas que así lo deseen podrán organizar actividades de refuerzo durante el verano. Debido a que las clases se hacen vía telemática,  los centros deberán identificar aquellos alumnos desconectados y tendrán tutorías adaptadas a las circunstancias del alumno. Deberán ser las comunidades autónomas las encargadas de que los alumnos cuenten con recursos tecnológicos para desempeñar su labor educativa.

Se desarrollarán  tareas de recuperación, repaso y refuerzo. El objetivo principal es que el alumno no pierda el curso y avance en su formación, para ello se realizarán diferentes evaluaciones como la autoevaluación y la coevaluación. Así pues,  la del tercer trimestre servirá para conocer aquellas áreas que necesiten un refuerzo de cara al próximo curso.

Para saber si el alumno ha adquirido los conocimientos, se tendrá en cuenta el conjunto de evaluaciones de todo el curso por lo que los centros y los docentes emitirán «un informe individual valorativo del trabajo realizado por sus estudiantes en el curso, que incluya los retrasos que hayan podido producirse y un plan de recuperación de estos».

Como ya comunicó Isabel Celaá, la promoción del curso será la norma general y la repetición «una medida muy excepcional, que deberá estar sólidamente argumentada y acompañada de un plan preciso de recuperación».

Ministerio, comunidades, centros educativos, y profesores deberán trabajar de manera coordinada para «adaptar las programaciones, actividades y criterios de evaluación» y evitar la sobrecarga de tareas.

Indicaciones específicas establecidas en el BOE

Los criterios de evaluación deberán ser adaptados por las comunidades autónomas renunciando a un cumplimiento exhaustivo de los mismos y valorando especialmente los aprendizajes imprescindibles. Para los estudiantes de bachillerato, se analizará la evaluación con carácter integrador y no diferenciado por materias. En FP se podrá incluir «un módulo profesional general» para garantizar la obtención de los conocimientos de este trimestre.

Respecto al procedimiento de evaluación se priorizará la de carácter continuo, diagnóstico y formativo, a partir de las evaluaciones anteriores y las tareas realizadas hasta ahora solo tendrán validez si favorecen al estudiante.

La promoción se podrá flexibilizar «sin tener en cuenta limitaciones que afecten al número de áreas pendientes». Para los alumnos de sexto de primaria, el informe individual será «de especial relevancia» dejando constancia de aquellos aspectos del aprendizaje no adquiridos en el tercer trimestre.

Los estudiantes de ESO que  pasen de curso con asignaturas suspensas, deberán seguir programas de refuerzo en el siguiente curso y en bachillerato, se autorizará la matrícula en las materias de continuidad de segundo curso pese a no tener superadas las de primer curso, en las que el alumno también tendrá que inscribirse y tener refuerzo.

En ESO la titulación se podrá «flexibilizar» teniendo en cuenta la adquisición de los objetivos generales establecidos para la etapa y el desarrollo de las competencias. En bachillerato, la titulación analizará la evolución del estudiante sin tener en cuenta las asignaturas suspendidas.

Todas las decisiones tomadas deberán quedar reflejadas en los documentos oficiales de evaluación para tener en cuenta el marco reglamentario, especificando las normas donde se establece el currículo y las de flexibilización.

Respecto a los procedimientos de admisión, el BOE recoge que las comunidades podrán asignar la supervisión de la admisión y escolarización  del próximo a la Inspección.