Francia vive con estremecimiento el hallazgo de unos restos óseos cerca de la casa de Lucas Tronche. El adolescente desapareció el 18 de marzo de 2015, en la zona de Bagnols-sur-Ceze. Todo indica que los huesos encontrados pertenecen a él.
Lucas desapareció misteriosamente cuando tenía 15 años. Su caso ha sido uno de los más mediáticos en Francia en los últimos años. Un programa de televisión ayudó a difundir esta historia, que desembocó en una incansable búsqueda.
El 18 de marzo de 2015, Lucas Tronche, un chico de 15 años, salió de casa con su mochila y cerró la puerta. Iba camino de coger el autobús para dirigirse a clase de natación. Pero nunca llegó ni a la parada del autobús ni a la piscina.
El joven, sencillamente, se esfumó. La policía inició inmediatamente una investigación, pero en todos estos años no ha habido pistas fiables sobre su paradero. De hecho, nunca tuvieron claro si fue una desaparición voluntaria, un accidente o un suicidio.
Hace unas horas, la policía francesa encontró unos restos óseos con la ropa y la mochila que llevaba Lucas el día que desapareció. Según fuentes policiales, «será muy difícil saber qué pasó con Lucas Tronche, pero los restos encontrados parecen ser suyos».
Un gran parecido
El fiscal Eric Mauel ha confirmado hoy que hay un gran parecido entre los objetos hallados y los descritos en la desaparición. El cuerpo estaba a menos de un kilómetro de la casa familiar. Está a punto de resolverse así el mediático caso abierto hace seis años.
Los padres de Lucas han aprovechado para lanzar un mensaje: «Ahora es el momento del silencio. Este silencio es necesario para permitirnos recobrar la compostura, encontrar la paz, y seguir sin él».
La jueza de instrucción autorizó el registro en una zona de difícil acceso y rodeada de paredes rocosas. A menos de un kilómetro en línea recta está el hogar del Tronche. Las excavaciones sacaron a la superficie los restos de ropa y la mochila.
Los bomberos especializados en intervención en entornos peligrosos han descendido con arneses y equipos especiales. Mientras, los agentes de la brigada criminal siguen peinando la zona. Buscan pruebas que ayuden a esclarecer lo sucedido.
El siguiente paso será cotejar las muestras de ADN con el perfil genético del muchacho. El fiscal no ha confirmado que se trate del cuerpo de Lucas. Pero sí ha deslizado que hay una gran similitud con la ropa que llevaba el día que desapareció.
'Gracias por estar ahí'
Junto a los huesos encontraron un abrigo de plumas, el mismo que llevaba Lucas cuando desapareció. Primero tendrán que confirmar si efectivamente se trata del adolescente. Después, los investigadores tendrán que reconstruir sus últimos instantes con vida.
SOS Lucas Tronche, una organización creada para ayudar a encontrar al chico, ha difundido el mensaje de los padres. Agradecen a todas las personas que se movilizaron para encontrar a Lucas. Han sido seis años de angustia y sufrimiento para ellos.
Los padres también han anunciado que no harán más declaraciones y piden respeto a su silencio. Antes, agradecieron también a los medios de comunicación y equipos policiales. «A todos nuestros amigos y compañeros, que tanto nos han ayudado, gracias por estar ahí»
Qué le pasó a Lucas, el gran misterio
La clave ahora es saber si fue un accidente o un acto provocado por alguien. El lugar donde han aparecido los restos hace pensar en una caída accidental. Pero tampoco se puede descartar que alguien le empujara.
El fiscal ha asegurado que «va a ser muy difícil, porque ha pasado mucho tiempo». «Lo que encontramos ha sido alterado por el tiempo y el clima, pero la voluntad de todos es arrojar luz sobre este asunto», ha añadido. Mantienen todas las hipótesis abiertas.
El propio fiscal ha a enumerado todas las hipótesis con las que están trabajando los investigadores: una caída accidente, un gesto voluntario de tirarse al vacío, o un asesinato. Será la última tarea para resolver el caso de la desaparición de Lucas Tronche.
Lucas Tronche nació el 18 de abril de 1999, y es el menor de tres hermanos. Sus padres, Nathalie y Eric, trabajan como ingenieros en una empresa estatal. Sus amigos le describen como un adolescente feliz y amable, sin aparentes problemas psicológicos.
Era un gran aficionado a la naturaleza y tenía un cariño muy especial por los animales. No había problemas en la familia y siempre era muy servicial con los demás. Estudiaba primero de secundaria, era un buen estudiante, y quería convertirse en veterinario.
Además, era un chico deportista que se había aficionado a la exploración. Practicaba bádminton y natación, y raramente utilizaba las redes sociales. En el momento de desaparecer, planeaba un viaje a Estado Unidos con su familia.