Fotografia de un hospital saturado de enfermos de coronavirus

Alfonso, fallecido en España tras no poder operarse debido a la tercera ola

Tenía 76 años y una pancreatitis moderada que empeoró al ser cancelada la operación que esperaba desde diciembre

Alfonso Gomis Salas no aparecerá en las estadísticas de fallecidos por coronavirus. De hecho, técnicamente no falleció de Covid-19. Pero la suya es una más de las muertes colaterales por la saturación del sistema sanitario a causa de la pandemia. Alfonso murió esperando una operación que le podría haber salvado la vida.

El 22 de diciembre, Alfonso tenía prevista una intervención quirúrgica en el Hospital General de Castellón para tratar la pancreatitis crítica que padecía. Pero el cierre de los quirófanos antes de Navidad impidió que la operación se llevara a cabo, y su estado empeoró.

Su hija Olaia no tiene ninguna duda: su padre fue víctima de «una negligencia». La intervención fue cancelada cuando ya estaba el preoperatorio en marcha, y lo que empezó siendo una pancreatitis moderada derivó en una situación grave que le llevó a ingresar de nuevo el 17 de enero y a fallecer tres días después.

Su hija lamenta que tampoco pudieran operar a su padre durante este segundo ingreso. Dos días antes del fatal desenlace, Olaia había presentado una queja al Servicio de Información y Atención al Paciente (SAIP) para «denunciar la situación, después de que el médico dijese que le daría el alta si así lo consideraba». Horas después el mismo médico le informó de que su padre había fallecido. 

Alfonso ingresó por primera vez en el hospital el 4 de diciembre, con 76 años y unas piedras en la vesícula que le causaron una pancreatitis. El hombre volvió a casa con la fecha de la operación ya asignada, pero «el 22 de diciembre le dijeron que no se podía operar porque habían cerrado los quirófanos por la Covid-19 y que entraba en lista de espera».

Su estado fue empeorando a pesar de que recibía medicación y seguía una dieta estricta. El 17 de enero fue de nuevo a Urgencias y Olaia pidió al médico que operaran a su padre. «Me dijo que era igual que la otra vez y que era una pancreatitis moderada», explica, y entonces decidió poner la queja «porque vi que le enviaban a casa cuando su estado había empeorado».

Al día siguiente recibió la llamada del doctor diciéndole que el estado de salud de su padre había empeorado. «Entonces nos dejaron entrar en la habitación por primera vez», sigue contando, «y al menos no murió solo». La hija de Alfonso está segura de que podrían haber abierto un quirófano si hubieran querido, o derivarlo a la privada para operarlo, «pero no quisieron hacerlo».

La familia acudirá a la Justicia

La familia de Alfonso ya está recopilando pruebas y documentación para acudir a la Justicia «y que dejen de ejercer quienes no velan por la salud de los pacientes». Su hija subraya que «no se trata de pedir dinero, sino responsabilidades» ya que en su opinión «se podía abrir un quirófano y no se hizo y mi padre ya no está».

«Sé que la Covid-19 es algo muy serio, pero también que hay pacientes que necesitan atención urgente y ser operados», alega. En la queja al SAIP relata todo lo ocurrido con el informe de alta, el de tratamiento vigentes, su inclusión en la lista de espera y el preoperatorio al que fue derivado antes de suspenderse su intervención. 

Pendientes de Atención al Paciente

El Hospital General de Castellón ha trasladado a la familia sus condolencias por el fallecimiento de Alfonso. Fuentes del centro confirman que la familia ha interpuesto una queja al Servicio de Atención e Información al Paciente, y ahora tiene que emitir una respuesta en base a los criterios clínicos que se encuentran en la historia del paciente. 

«Al tratarse de datos de carácter personal, no podemos transmitir información sobre los hechos que ocurrieron», concluye el hospital. A principios de enero, el Hospital General de Castellón planteó la suspensión inmediata de toda actividad quirúrgica, excepto la oncológica no demorable, y las consultas a los pacientes por la saturación hospitalaria en la tercera ola.