Un sanitario español manipulando muestras de pruebas PCR

Alarma mundial por la infección del 'hongo negro' por el Covid: Puede obligar a amputar

Los médicos de la India, que está sufriendo una catástrofe con su segunda ola, han alertado del aumento de casos

La India se ha convertido en el epicentro mundial de la pandemia de Covid-19 con una nueva ola, la segunda del país, mucho más devastadora de la primera y que tiene un peligro añadido: está provocada por la cepa india. Los 400.000 contagios diarios del pasado sábado y los más de 4.100 muertes en solamente 24 horas dan muestra de la magnitud de la pandemia en ese país. 

Además, por si no fuera poco, los médicos de la India han alertado de un fuerte aumento de casos de las infecciones denominadas como 'hongo negro' que están provocados por la Covid-19 y que pueden tener resultados desastrosos para algunos pacientes. 

Según han informado las autoridades del país, en las últimas semanas se han detectado 300 casos de estas infecciones, la mayoría de ellos ya recuperados de la enfermedad. Se trata de una peligrosa infección que puede llegar a provocar la necesidad de amputar la zona afectada, especialmente extremidades, o incluso causar ceguera en los casos más graves. 

Concretamente, se trata de un brote de mucormicosis detectado en los hospitales del noroeste de país, en la zona de Guyarat. En estos centros se ha habilitado habitaciones especiales y aisladas para tratar las infecciones, sobre todo en Ahmedabad, Bhavnagar, Jamnagar Rajkot, Surat y Vadodara.

Para ayudar a tratar estas infecciones, el gobierno del estado ha ordenado 5.000 inyecciones de anfotericina B. El medio 'India Today' ha explicado que casi todos los casos detectados se han dado en personas que ya habían superado la enfermedad, por lo que se creían a salvo de sus consecuencias. 

Al menos ocho personas que han sufrido este 'hongo negro' han perdido la vista en la ciudad de Surat, en la que viven unos 4 millones y medio de habitantes. En el estado de Maharashtra, donde hay otro brote de esta infección, hay actualmente 200 personas bajo tratamiento, y en las últimas semanas han fallecido ocho personas por ella. 

La mucormicosis está considerada una complicación poscovid, pero por suerte es una enfermedad que se considera curable, aunque puede provocar episodios graves que lleguen a acabar con la vida de los pacientes si no se trata a tiempo. 

El doctor Atul Gogia del hospital Sir Ganga Ram explica que estas infecciones ocurren «cuando los pacientes tienen el azúcar alto o fuera de control», y que las personas que lo sufren tienen un 50% de posibilidades de sobrevivir al hongo.

El peligro ahora es que el aumento de infecciones por Covid-19 acabe llevando a muchos más casos del hongo negro, ya que mientras más personas sufran esta infección, más posibilidades hay de que otras personas respiren sus esporas y acaben sufriéndola también, especialmente teniendo en cuenta que el país suma entre 300.000 y 400.000 casos de Covid-19 diarios.

Qué es la mucormicosis

La mucormicosis, también conocida como 'hongo negro', es una infección fúngica poco frecuente que se origina por un grupo de moho u hongos llamados mucormicetos. El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC; en sus siglas en inglés) detalla que esta infección suele afectar a los senos nasales o los pulmones, dos de las áreas que a su vez son más afectadas por el coronavirus. 

La enfermedad aparece después de inhalar esporas de este hongo que estén en el aire, aunque también puede aparecer en la piel después de una quemadura o corte si esa parte de la herida entra en contacto con las citadas esporas. 

Una vez cogida la infección, los síntomas pueden ir desde un dolor de cabeza y congestión nasal hasta la inflamación de toda una parte de la cara y la aparición de ceguera. En el caso de que se produzca por una herida o quemadura, la zona afectada podría llegar a verse amputada en los peores casos. Y en ambos casos, si no se trata a tiempo, la infección también puede provocar la muerte. 

En algunos pacientes incluso ha sido necesario extirparles la nariz o la mandíbula para evitar el avance de la infección.