El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha afirmado que la Consejería de Salud asturiana está trabajando ya en las «medidas drásticas que habrá que adoptar» para frenar la expansión del coronavirus en la región, que se ha convertido en una «realidad peligrosa».
En un vídeo publicado en Facebook, Barbón ha indicado que los últimos datos de nuevos contagios, 139 registrados en el día de ayer, son «muy malas» cifras, que sitúan a Asturias en el «peor» de los escenarios vividos desde el comienzo de la pandemia.
El Gobierno del Principado se prepara para «lo peor» de la pandemia
Por tanto, el presidente asturiano ha apuntado que la Consejería de Salud está trabajando en «analizar la situación» y en comparar la realidad de la región con la de otras comunidades y otros países. «Os doy la garantía y la completa seguridad de que el Gobierno de Asturias está analizando todas las medidas a nuestro alcance», ha sentenciado.
Barbón ha avisado de que el pasado viernes el Gobierno del Principado eligió ampliar las medidas generales de prevención para toda la población debido al incremento de la trasmisión del coronavirus detectado en Asturias, sobre todo en los gimnasios. La norma recoge la obligatoriedad del uso de mascarilla en espacios cerrados de uso público o que están abiertos a ese uso. Además, se aplicará a los centros de trabajo que cuenten con espacios comunes, pese a que se mantenga la distancia de seguridad de metro y medio.
A su vez, deberá haber aforos máximos para la práctica de actividades de grupo, en los que se guardará una distancia mínima interpersonal de un metro y medio para que la práctica deportiva no aumente el riesgo de contagios.
Barbón ha defendido la 'alerta naranja' ya que ha demostrado «resultados positivos»
Salud ha tomado la decisión de restringir a seis personas los grupos en mesas de hostelería o restauración con el objetivo de establecer círculos estables de interacción social y frenar con ello la trasmisión del virus.
Barbón también ha defendido la 'alerta naranja' ya que ha demostrado «resultados positivos» y en algunos concejos ha permitido reducir a la mitad la incidencia. Barbón ha insistido en la necesidad de evitar aglomeraciones y espacios cerrados donde no haya ventilación, reducir el número de contactos estrechos, extremar las medidas de higiene y mantener la distancia interpersonal, así como el uso de mascarilla.